Mónica la morenita.
Mónica es una de las deliciosas nenitas de mi harem de la bodega, tiene 13 años, pero se comporta como una chica mayor para su tierna edad.
Cuando las nenitas llegan cada noche a la bodega, siempre les tengo preparada la cena, ellas son seis preciosas chiquitas.
Entre ella esta Mindy, mi preferida que ya les relate como es que la conocí y me trajo a las demás.
El día que le toca pagar a Mónica siempre nos encerramos en el baño y conectamos el agua caliente de la regadera. Le encanta estar empapada con ropa y todo bajo el agua tibia.
Cuando le toca pagar a ella la estadía y la comida que les doy, lo hace de tal manera que si pudiera le daba de regalo todo que deseara.
Ella siempre entra primero y cuando llego, ya esta completamente mojada con la regadera que le da el agua caliente en todo su cuerpo. Ella dice que así se prepara para que sea un cuerpo suavecito y caliente para mí.
Al entrar cierro la puerta del baño, me quito la ropa y entro con ella al agua, comenzamos siempre con que yo le vaya quitando la ropa muy suavemente, ella me va diciendo como, lo que para mi es un acto excitarse. Mientras le quito su ropa ella acaricia mi pene como masajeándolo, es una morena pequeñita pero con tetas grandes para su edad.
Cuado ya esta completamente desnuda, ya mi pene esta tan duro por su masaje que se arrodilla y me lo mama, con tal paciencia y metiéndoselo hasta su garganta y todo entra en su boca. Sabe hacerlo muy bien, ella cada día que me lo mama, lo hace mejor.
Lo saca y vuelve a meter, le pasa la lengua muy suave, hasta que la explosión de mi semen le cubre su cara, tragando el que entre en su boca con una cara de puta que me hace estremecer de pasión…
Mónica llego con Mindy la noche siguiente, de aquella situación de robo que no fue, con todas las nenitas de mi harem y entre ellas la morenita Mónica. Siempre estuvo muy dispuesta a entrar conmigo al baño, Creo ella fue la que hizo esta rutina tan deliciosa, una costumbre fabulosa.
Cuando termina de mamarlo y sacar todo mi semen, se pone de pie y se pone Le encanta ponerse a bailar meneando sus caderas como bailarina árabe. Pasa su culito por sobre mi glande para que se erecto nuevamente. Luego roza sus tetas grandes y pezones duros por mi pecho; situación que me pone muy caliente.
Ella sabe hacerme encender a full. Cuando siento que ya no doy mas, la tomo de su brazo y trato de ponerla en cuatro, a lo que ella se niega y escapa en un juego erótico muy placentero. Mónica sabe que mi deseo de penetrarla, ya no da más y escapa para que la atrape, metiéndose bajo la banca y detrás de las toallas colgadas en deslizamientos rápidos como gusano mojado por todo el cuarto de baño.
Cuando logro atraparla y dominarla, ella comienza a gritar como si fuese la primera vez que le meten por el culo. Da gritos desesperados como niña virgen, y sonríe maliciosamente.
La actitud de ella me pone a mil por horas… cuando logro al fin tener su culo a mi disposición, miro ese culo grande y moreno y le meto mi pene con gran decisión. Ella sigue gritando y golpeando las murallas. Es delicioso como finge que le están abriendo por primera vez.
Cuando le bombeo todo mi pene dentro, me dice que siga que le esta gustando tanto que desea que se lo meta bien dentro, que le llegue hasta la garganta.
Cuando acabo dentro de su recto y al momento de llenar todo su culo con mi explosión de semen, se lo saco y presiono con mis manos su nalgas, para ver como sale de su interior la leche que le deje dentro y que rebasa de ano.
Mónica se pone de pie salta sobre mi… abrazándome y rodeando mi cintura con sus piernas tibias, ¡…diciéndome ¡papito lindo, hazme lo mismo por mi agujerito de aquí..!, señalando su vagina.
Es una morenita genial, a pesar de sus 13 años sabe como excitarme y hacer que mi pene no decaiga nunca. Le pongo la punta de mi glande en la entrada de su rajita vaginal y solita ella mueve de tal forma sus caderas, que tiene la facilidad de hacerme explotar en su vulvita rojita. Me dice al oído métemelo hasta hacerme arden y dejarme roja mi chochito.
Cuando quedo rendido, ella siempre se mete al agua de la regadera y me muestra como se limpia sus agujeritos. Sea pone una toalla envolviendo su cuerpo, abre la puerta del baño, y me dice “te espero en la cena nene”.
Me baño y me voy a cenas con las cinco nenitas, y desde la otra esquina de la mesa, Monica me sonríe picaronamente.
Mindy, como celosa se sienta a mi lado, y dice hoy dormirás conmigo en tu habitación verdad?.
Las otras cinco nenitas se van a sus camas detrás, donde han hecho de sacos de ropa de la bodega sus camas blandas y cómodas
Y vamos a dormir con Mindy de la mano, que me lleva a la cama del altillo.
Continuará
, ¡pero quizás tú si la tienes 
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