El abuelo Javier

Un hombre de 70 años inicia a sus nietitas de 7 y 12 años, Julia y Raquel, perforando por la conchita a esta última, y dejándole todo su esperma dentro.

Don Javier era un señor de 70 años, tenía su cabello lleno de canas y no era gordo pero estaba llenito, su esposa Laura era una mujer muy amable, siempre atenta y cariñosa. Tenían dos nietas Raquel la mayor tenía 12 años y Julia tenía 7.

Todas las tardes saliendo de la escuela iban a su casa.

Hubo una ocasión en que la señora Laura salió de viaje a visitar a sus hermanas y Don Javier no podía acompañarla en esta ocasión, el estaba deprimido por esta situación ya que desde que se casaron nunca se habían separado por tanto tiempo.

Una mañana Don Javier empezó a recordar a su esposa pensaba en sus deliciosas caderas y como le gustaba chupársela, comenzó a masturbarse pensando en ella.

Por la tarde llegaron sus nietas y después de comer empezaron a hacer sus tareas mientras Don Javier trataba de leer el periódico. Julia termino pronto y se acerco a su abuelo para preguntarle que hacia y se sentó en las piernas de su abuelo.

Después de un rato la niña se aburrió, comenzó a jugar y empezaba a moverse

Con el movimiento de las nalguitas de Julia comenzó a parársele la polla a Don Javier y se empezó a dejarse llevar, le agarro sus piernitas y empezó a acariciarlas.

- abuelito que haces? Porque te mueves tanto

- no hago nada preciosa, tu sigue jugando

Levanto su faldita escolar hasta que quedaron al descubierto sus braguitas y llevo sus manos hasta su entrepierna acariciándola suavemente. Julia no sabía que estaba pasando pero no decía nada ya que le tenía mucha confianza a su abuelo.

Entonces se abrió los pantalones y saco su dura polla y la acomodo entre sus suaves nalguitas, hizo a un lado el cabello de la niña y viendo su cuello le dio unas lengüetadas que hicieron estremecer a la pequeña Julia y Don Javier comenzó a sobársela con las nalguitas de su nieta y se corrió rápidamente.

Julia al sentir mojado se intento parar, Don Javier escondió su verga.

- Que pasa Julia?

- No lo sé, creo que me moje pero no sé porque

- No te preocupes cariño vamos a la recamara para que te limpie

Don Javier llevo a Julia a la recamara y le pidió que se quitara su uniforme.

- De que te manchaste? se ve raro. Déjame verlo bien, quítate tus braguitas

- No lo sé abuelito, que es eso?

- Voy a probarlo para ver que es

Don Javier comenzó a lamer el coñito de la niña dándole unas deliciosas lengüeteadas Julia empezó a retorcerse de lo rico que sentía.

En eso llego Raquel y pregunto que hacían. El abuelo solo la jalo le quito su uniforme y la tiro a la cama junto con su hermana y mientras le chupaba el coño a una se lo frotaba a la otra intercambiando.

De Raquel comenzaron a escurrir sus juguitos y el abuelo los saboreaba y disfrutaba y aprovecho para introducirle un dedo. Al principio Raquelita se quejaba un poco pero después empezó a disfrutarlo

Estaba tan excitado que su polla estaba durísima, a punto de explotar que sin pensarlo levanto a Raquel de la cama, la agarro de la cabeza y dirigió su boca hacia su polla haciendo que se la chupara.

Raquel no sabía que hacer.

- abre la boca

- arghhhhhh

Don Javier metía y sacaba su polla dentro de la boquita de Raquel cada vez más rápido mientras seguía dedeandola.

Entonces Don Javier se recostó en la cama poniéndose sobre la pequeña Raquel comenzó a introducir suavemente su verga en su estrecho hoyito sin importarle mucho las quejas de su nieta comenzó a moverse dentro de ella. Era el chocho mas delicioso que jamás había tenido era riquísimo y se movía adentro y afuera con una desesperación enorme.

- ahhh ahhh ahhh que delicioso hoyito tienes mi vida

- ohhhh que rico

- ahhh ahhhhhhhhhhhh

- me corro me corro

Don Javier sin dejar de moverse se corrió dentro del coñito de si nieta, y dejo caer unas gotitas de su leche en la entrada del coñito de Raquel y le dijo a Julia.

- Ahora limpia a tu hermana con tu lengüita

- Y tu Raquel limpiame mi polla con tu lengua

Las dos niñas probaron la leche de su abuelo y Don Javier había quedado satisfecho. Al menos por el momento...

Fin