Día de escuela.
La escena comienza con Nina sentada en el autobús escolar. Lleva un uniforme escolar tradicional y mira por la ventana. Dos niños mayores, de unos 12 años, se inclinan sobre el asiento detrás de ella.
"Hola, zorra", dice una de ellos. "¿Qué pasa?"
"Nada, Mike", responde la niña. "¡Solo que hoy me presento a las pruebas para el equipo de sóftbol!"
El amigo de Mike le responde: "¡El equipo de sóftbol es el grupo con más putas de la escuela! ¡No puedes con eso!"
"¡Claro que puedo, Jack!" protesta Nina. "Ya sabes lo guarrilla que puedo ser. Ya se la chupé a mi papi antes de salir esta mañana."
"¿Y qué?", dice Mike. "Todos se la chupan a su padre. Demuestra lo guarrilla que eres. Deja que Jack y yo te follemos ahora mismo". Los dos chicos se levantan de sus asientos y se dirigen al pasillo. Se bajan los pantalones y se apoyan en los respaldos. Sus erecciones preadolescentes miran fijamente a Nina. Se desliza hasta el borde del asiento, se lame los labios y toma una polla en cada mano. Frota la verga de Mike de arriba abajo y se inclina hacia la de Jack, tomándola en su boca. Después de unos momentos, se pasa a Mike.
Mike aparta la cabeza de la chica. "¡A la mierda con las mamadas!", dice. "¡Dije que te vamos a follar!". Nina se levanta y Jack la reemplaza en el asiento. Se tumba boca arriba y la pequeña lo monta a horcajadas, su erección deslizándose en su joven coño, que está desnudo bajo su falda. Se inclina para ofrecerle un ano a Mike, que lo penetra sin demora. Los dos preadolescentes penetran los agujeros de la niña de 8 años, mientras la pequeña gime y lo disfruta.
Unos minutos después, Mike agarra a Nina por los hombros y la aprieta contra su polla. Su cuerpo tiembla y le corre en el ano. Jack no tarda en seguirlo, y Nina gime con fuerza con su propio orgasmo.
La siguiente escena transcurre en un aula. Un hombre blanco de mediana edad escribe en la pizarra. La clase está formada por unos 20 niños y niñas, incluyendo a Naomi. De repente, parece sobresaltarse.
"Te hice una pregunta, Naomi "le dice. "Pareces distraída hoy, jovencita."
"Lo siento, Sr. Johnson", responde la niña. "Estoy pensando en lo de más tarde. Voy a hacer una prueba para el equipo de sóftbol".
"¿El equipo de sóftbol?" El Sr. Johnson sonríe y le guiña el ojo a la clase. "¿Te refieres al grupo de zorras más grande de la escuela?" La clase grita, y Naomi sonríe.
"Así es, Sr. Johnson", dice, y luego se gira hacia sus compañeros. "¿Quieren verme ponerme cachonda?", responden los otros diez años con una ovación. Naomi se levanta de su escritorio y se acerca al Sr. Johnson, quien está apoyado en el suyo. En lugar de arrodillarse, se dobla por la cintura hasta quedar frente a su entrepierna y su trasero y su coño desnudos quedan expuestos a la clase y a la cámara.
La niñita le baja la cremallera al Sr. Johnson, mirándolo fijamente. Su polla dura sale disparada y ella fija su mirada en ella. Saca la lengua y lame la punta, formando un hilo de líquido preseminal. Lame su miembro hacia abajo y luego hacia arriba. Envuelve el pene del profesor con sus labios y comienza a chuparlo, de arriba abajo.
El Sr. Johnson gime y pone sus manos sobre la cabeza de Naomi mientras los estudiantes exclaman "ohhh" y "ahhh". Una chica en la primera fila se ha levantado la falda y se acaricia el clítoris. Después de que Naomi se la chupe al hombre mayor durante unos minutos, Johnson se tumba boca arriba sobre el escritorio. Naomi se sube encima de él en la posición del 69. Continúa chupándole la polla mientras él le lame el coño y le mete el dedo índice en el culo. Naomi gime fuerte y claramente, disfrutando.
Naomi empieza a menear el culo, a punto de alcanzar el orgasmo. El Sr. Johnson también gime con más fuerza. Naomi llega al clímax, y momentos después, su profesor le dispara chorro tras chorro de semen en la cara y la boca. Usa el dedo para llevárselo a la boca y tragárselo. Los alumnos aplauden.
La cámara sigue a Kim caminando por el pasillo. Pasa junto a aulas y casilleros, y al final del pasillo, llega a una puerta con un cartel que dice "Conserje". Con libros en una mano, llama a la puerta. Un hombre negro corpulento, de unos 30 años, le abre y le sonríe. Lleva una camiseta sin mangas y vaqueros.
"Hola, niñita", dice. "¿Qué puedo hacer por ti?"
"Estoy haciendo una prueba para el equipo de sóftbol", dice Kim. "Así que tengo que ser una de las más zorras de la escuela. ¿Me ayudas?"
"Claro, cariño", responde el conserje. "Pasa". La lleva a su cuarto de suministros y cierra la puerta. Los estantes están llenos de productos de limpieza y herramientas, y hay un montón de escobas y trapeadores en un rincón. El conserje observa a Kim y la gira una vez, inspeccionándola y sonriendo.
"Veamos qué tienes", dice, apoyándose en un estante. Kim deja sus libros y su mochila en el suelo y se desabrocha la camisa. No lleva nada debajo. La tira al suelo mientras el conserje empieza a frotarse el bulto en el pantalón. La niña se baja la falda. Al igual que las demás, no lleva ropa interior. Ahora está desnuda, solo lleva calcetines hasta la rodilla y zapatos negros.
Kim se acerca al conserje. Su cabeza apenas le sobrepasa la cintura, una altura perfecta. Lame su bulto a través de los vaqueros y lo acaricia con las manos. El conserje acaricia el suave cabello negro de Kim mientras ella le baja la cremallera. Con cuidado, baja la cinturilla de sus bóxers hasta su pene, que es enorme. Kim saca la lengua y la recorre de arriba abajo por su miembro negro mientras él gime con fuerza. Ella lo rodea con los labios y empieza a chuparlo.
"Una zorrita como tú se merece una polla por cada agujero", le dice. Ella deja de chupar, sonríe y mira a su alrededor. Camina hasta la esquina y coge una escoba. A gatas frente al conserje, se mete la punta del mango en el coño, metiéndose unos 13 centímetros. Luego vuelve a chuparle la polla al conserje, mientras ambos gimen.
Pronto le apartó la cabeza de su polla. Con la escoba todavía en el coño de la chica, el conserje la montó por detrás, metiéndole media polla en el coño. La agarró por la cara, con dos dedos en la boca.
"¡Oh, sí!", grita la niñita. "¡Fóllame! ¡Fóllame el culo bien fuerte!". El conserje aumenta la velocidad y la fuerza de sus embestidas. Kim chilla con cada movimiento. Después de unos minutos, el conserje anuncia que está a punto de correrse, acerca el culo de Kim lo más que puede y le mete una carga tras otra. Se retira lentamente, y la cámara enfoca su culo enrojecido, con el semen rezumando.
La escena cambia a otra aula. Jessica y María están sentadas juntas. La clase está viendo una película porno de una chica en una orgía. Suena el intercomunicador y una voz pregunta: "¿Pueden enviar a Jessica y María a la dirección, por favor?". La profesora les hace un gesto con la cabeza a las chicas, que se levantan y caminan por el pasillo hasta una puerta que dice "Director". María abre la puerta y las gemelas entran.
El director está sentado tras su escritorio. Es un hombre de mediana edad, calvo, con perilla y en muy buena forma.
"Hola, chicas", dice. "Siéntense". Solo hay una silla frente a su escritorio. Jessica se sienta, y su hermana se sienta en su regazo. "¿Qué es eso de que te unes al equipo de sóftbol? ¿No saben que solo las más zorras de la escuela pueden hacerlo? Me temo que ninguna de las dos está calificada".
"¡Estamos realmente cualificadas!", protesta María. "¡Podemos ser guarrillas! ¡Ya lo somos! ¡Justo la semana pasada se la chupamos a todo el equipo de béisbol!"
El director sonríe. "Ah, es cierto", dice. "Bueno, quizá. No lo sé".
"¡Déjennos mostrarles!", exclama Jessica. Las gemelas de 8 años se levantan y empiezan a limpiar el escritorio del director. Cuando terminan de hacer espacio, se desnudan lentamente. Jessica se tumba boca arriba sobre el escritorio, y su hermana la monta a horcajadas en la posición del 69. Las chicas empiezan a comerse los coños. El director se ha bajado la cremallera de los pantalones y se está masturbando.
Las chicas gimen a gritos y se dicen guarradas. El director no aguanta más y se acerca a un extremo del escritorio. Se baja los pantalones y atrae a las dos chicas hacia él, penetrando el coño de María con su polla. Sus testículos rozan la cara de Jessica mientras ella sigue lamiendo el coño de su hermana.
"Ustedes dos son unas guarrillas", dice el director, respirando agitadamente. "Siempre lo supe. Pero necesitaba una prueba más". Saca su polla del coño de María y se la ofrece a su hermana, quien empieza a chuparle los jugos con fervor. Al poco rato, se la vuelve a meter a María, y Jessica vuelve a lamerla.
El director está a punto de correrse. Se retira y empieza a masturbarse. En cuestión de segundos, chorros de semen salen de su polla y caen sobre el coño de María, goteando sobre la lengua de Jessica, quien lo recibe con gusto. Una vez que termina, las chicas se incorporan y se miran. Se abrazan en un beso, el semen del director les cubre la lengua y la barbilla.
Continuará