El relato erótico "Soldados, Parte 01" es un texto de ficción, ni el autor ni la administración de blogSDPA.com apoyan los comportamientos narrados en él.

No sigas leyendo si eres menor de 18 años y/o consideras que la temática tratada pudiera resultar ofensiva.

Esta publicación es la parte 1 de un total de 2 publicadas de la serie Soldados

Misión: Rescatar de un país ubicado en oriente medio a la hija del diplomático Edward Evans y a la amiga de la hija, llevarlas a un lugar específicamente resguardado, esperar hasta nuevas ordenes.

Total de elementos: 4 soldados y 1 Sargento en jefe con nivel 9 en seguridad internacional.

Acciones del día 001-A

Después de un mes de intensas negociaciones el Embajador Edward Evans, se vio imposibilitado a regresar a su hogar ubicado en un pequeño país de medio oriente las fricciones con los rebeldes lo obligaron a permanecer en Washington D.C. junto de el se encontraba su bella esposa Rachel, ambos habían aprovechado la junta internacional sobre seguridad realizada en Paris, para pasar unos días de paseo por esa romanita ciudad Europea, su pequeña hija de 9 años Nicole había decido quedarse con su amiga de colegio Emily y pasar esos días de vacaciones vagando en la exótica ciudad tan llena de hombres guapos, gustaban de salir a la calle vistiendo diminutos atuendos provocando que los hombres les llenaran de piropos en su extraño idioma, que aunque no los entendían, por la simple calentura de sus voces, se imaginaban a lo que se referían, ambas reían divertidas ajenas a los acontecimientos que se acercaban.

Ese día en particular ambas chiquillas tomaban un refrescante baño antes de salir a dar su acostumbrado paseo, el agua corría por sus delicadas curvas cubriendo los huecos en sus pequeños cuerpecitos una a otra se pasaban el jabón acariciando suavemente sus pezoncitos que apenas despuntaban como bellas promesas de unos bellos senos, sus dedos acariciaban la unión de sus glúteos rosados y firmes y levemente se pasaban su dedito por su diminuta rajita que apenas asomaban unos finos vellos en la entrada de sus virginales vulvas femeninas, leves gemidos escapaban de sus húmedas boquitas rojas al sentir la suave caricia, tímidas risitas se escucharon en el espacioso baño de la embajada americana, salieron envueltas en unas diminutas toallas blancas las cuales a duras penas cubrían sus nacientes senos y sus infantiles nalguitas, corrieron a la enorme cama matrimonial y juntaron sus boquitas en un deliciosos beso profundo.

Ese día habían quedado de verse con un joven de 15 años de nombre Dan hijo de un secretario de gobierno, que era el mas joven de la embajada a quien ellas veían con morbosa curiosidad, solamente Nicole había sido objeto de apasionados besos a escondidas con el joven y ahora era el turno de Emily de probar por primera ves en su corta vida unos labios masculinos ya que la única lengua que había entrado en su boca era la de Nicole en sus “inocentes” jugueteos en la ducha. Las dos sintieron humedecerse al ver llegar al apuesto joven en su camioneta, se fueron a la sala y Nicole fingió irse por unos refrescos para dejarlos solos y corrió a ubicarse atrás de la cortina para tener amplia visión de los acontecimientos, vio a su amiguita acercarse sensualmente a Dan quien solo se dejo hacer, sus manos recorrieron los suaves muslos de Emily subiendo hasta su húmeda rajita provocando que la jovencita abriera como platos sus bellos ojos azules, la boca de dan la atormentaba dulcemente sin dejarla tomar aire nunca había besado a un hombre y la voracidad con la que era tratada provocaba que su rajita mojara su pequeño calzoncito, el joven tomo su blanca mano y la deposito en su endurecida verga que pareciera romper su pantalón azul, lentamente la fue acostando y se monto sobre su frágil cuerpo que todavía tenia la inocencia de la infancia, sintió que sus piernas eran abiertas y algo duro picaba su cuevita, se levanto asustada había llegado demasiado lejos y suspiro aliviada al ver llegara su amiga, los tres rieron divertidos como si hubieran hecho una travesura, el joven se despidió de las dos amigas y al quedarse a solas se abrazaron emocionadas.

¿Qué paso?

“fue increíble, lo mejor que me ha pasado”

¿Le tocaste la polla?

“si, estaba bien dura”

¡Que atrevida eres, vi que no quitabas la mano!

Las dos amiguitas se fueron comentando sus avances con el joven, aun no se decidían quien de las dos daría el primer paso para convertirse en mujer y las dos estaban listas para lo que pasara con el joven Dan, charlando de sus aventuras las dos se quedaron dormidas.

Continuará

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