
Imágenes SH0T4: "Sexo con criaturas fantásticas" [5 puntos]
2 de febrero de 2025 en Imágenes L0L1 & Sh0t4

Mi sobrinita "La Peque", ¿dormida? (de Sol y Lucas)
1 de febrero de 2025 en Jovencitas, Incesto, Relatos SDPA
Este relato ya tiene varios años, en ese entonces hacia dos años que estábamos saliendo con Sol y hacía pocos meses nos habíamos decidido a convivir en el depto que yo alquilaba.
La Peque es una de tantos sobrinos que tenemos y esta es mi historia con ella:
Todo empezó cuando ella tenia 5 años, hoy tiene 13.
Es una niña de contextura pequeña (por eso le dicen Peque) de piel canela y pelo color miel, sonrisa amplia y carácter dulce.
En ese verano su madre, mi cuñada, estaba pasando por una situacion dificil, por lo que nos pidió hacernos cargo de la nena y su hermano por algunas semanas, mi novia y yo accedimos con gusto.
Confieso que siempre me gustaron las niñas, pero Peque era muy pequeña para su edad (parecía de 3) era delgadita y tenía poca cola aunque era muy bonita.
Era una nena muy dulce pero muy tímida. En ese entonces tenia un problema en el habla que no le permitía expresarse normalmente, lo que la frustraba y la avergonzaba porque en el jardín se burlaban. Creo que por eso prefería hablar lo menos posible.
En fin, el primer episodio morboso con ella fue una noche que yo estaba muy caliente y mi esposa mandó a dormir a los niños, pero durmieron en el living ya que es mas fresco y hay tv.
Yo estaba viendo tv y mi esposa fue a darse una ducha.
No pasó ni un minuto que mi sobrina se destapó y la vi en bombachita durmiendo y su bultito que se le marcaba, tal vez por ser delgadita resaltaba más. Ver esa telita infladita con dibujitos de frutillitas en dio un golpe de calentura.
Me exité tanto que se me paró la pija en segundos.
Me acerqué y la toque por encima de la bombachita para ver cómo reaccionaba, pero ni se inmutó.
Comencé a acariciarle la conchita y me atreví a correrle hacia un lado la bombacha.
Dios! Que papito mas abultadito tenía.
Espectante al sonido de la ducha, sabia que mi mujer se tomaba su buen tiempo para ducharse.
Entonces le baje un poquito su bombachita.
Uff! era una vaginita infladita y bien cerrada.
Me arrodillé, y le lami la conchita.
Mmm que cosita más suave y rica.
Tibiecita, humeda y con olor a nena.
Le chupé la conchita por un rato y mientras me pajeaba y cuando escuché cerrarse la ducha fui a la cama hasta que vino mi mujer.
Yo casi siempre me despierto a la madrugada con una gran erección y ganas de coger.
Pero como a veces no quiere, intento dormirme o me toco para descargar.
Pero esa noche no.
Me levanté y fui donde estaba la Peque, la destapé, le baje apenas el calzoncito de manera rápida y no se movió.
Empecé a pajearme con la vista, pero no era suficiente.
Estaba arrodillado a los pies de la cama.
Ella durmiendo de costado.
Asi que la acerqué al borde de la cama, me ensalivé la pija y se la empecé a frotar por la conchita y por la cola.
Aaay! que rica sensación! mi pija entre los labios de una conchita suave, de 5 años y era mi sobrina, y estaba dormida.
El morbo era demasiado.
Estuve así dos minutos y acabé sobre mi mano para no manchar a la nena.
Le subi la bombacha y me volvi a mi cama y me dormí.
La noche siguiente me vuelvo a despertar caliente y vuelvo a repetir la acción, le bajo la bombacha la acerco al borde y empiezo a frotarme.
Pero queria algo más.
Asi que la puse boca arriba, le puse la bombacha a la altura de las rodillas y yo arrodillado a los pies de la cama.
Levanté sus piernitas, ella nose movia, y las puse sobre mi pecho.
Y ahí empezó lo rico.
Mi pene rozaba su vulva y su anito, sus labios estaban jugosos y calentitos, le apoyé mi pene ya lubricado y empecé el vaivén.
era como estar cogiendome a la nena.
La agarraba de las piernitas, ella ni se movia.
Segui cogiendola sin penetrarla y le tiré toda la leche espesa sobre la conchita.
Me asusté, la limpié y me volvi a mi cama.
Pero no podia dormir, queria mas.
Asi que volvi y repetir la operacion, solo que esta vez tome mi celular y empecé a grabar.
Segui frotando su pene con esa conchita suave sin pelitos y calentita, rica, mientras grababa.
Acabé dos veces.
Pero seguia caliente, era impresionante.
Pero me fui a dormir.
Al otro dia me desperté con miedo de que dijera algo, cómo que haya sentido que la toque o que le picaba la cosita pero pasaron los dias y todo seguia normal.
Estuve viendo los videos y llegué a la conclusión de que una nena no puede estar así siendo molestada tanto tiempo sin estar despierta.
Practicamente me la estuve cogiendo.
No podia tener el sueño tan profundo.
Asi que una noche quise comprobarlo y me arriesgué más.
Empecé igual que las ultimas veces, ya la destapaba sin temor, pero esta vez la baje al piso sobre una colchoneta, la acomodé como siempre y empece, le rozaba el pito por la vagina por un rato y me acerqué a ella y la besaba en la boquita y en el cuello.
Y me atrevi a susurrale mientras me meneaba sobre ella:
-Mmm que rica conchita tenes, bebé
-Sentis el pito del tio mi amor?
-Te gusta bebé? El tio te esta haciendo el amor
-Me encanta tu conchita, Peque
-Ay dios, tengo unas ganas de metertelo acá (mientras le punteaba la conchita) o aca (y le punteaba el ano)
-Decime si te gusta bebé, yo se que estas despierta.
Nunca estuve tan caliente y con tanto morbo y ella seguia sin moverse, era imposible que esté dormida, pero no abria sus ojos.
Hasta que llegaron las ganas de acabar.
-Ahi viene la lechita bebé
-El tio te la a llenar de leche la conchita mi amor
-Ah si Peque te amo
-Aaay mi amooor, que ricoooo
Y empujé apenas tratando de dejarle un poco de mi semen adentro.
Y acabé tan caliente y espeso como nunca antes.
Pero apenas termine le saque una foto y agarre un trapo que habia llevado para limpiarla y le subi la bombachita.
Yo me sentia culpable y con miedo pero seguia exitado, mas ella no se movia.
Pero no queria ensuciarla de nuevo.
Asi que la puse de costado y me acosté con mi pene a la altura de su boca.
Puse a grabar con el celular y empecé otra vez:
– A ver mi amor, ahora vas a probar el pito del tio.
-Mmm abri la boquita bebé
Puse un dedo en su barbilla y empuje un poco hacia abajo para que abriera su boca.
Noté cierta resitencia lo que me daba mas razones para creer que no estaba dormida.
Tiene la boca muy chiquita a comparacion de mi pija, pero eso me exitaba más.
-A ver bebe.
Amm que rica boquita que tenes.
Mientras le rozaba la cabeza por los labios y empujaba un poco.
-Dale mi amor, chupale la pija al tio que te quiere mucho.
Y empece el vaiven con las caderas.
Le estaba cogiendo la boquita!
Me volvia loco, esa calidez de su boquita, la suavidad de su lengua, apenas entraba mi cabeza!
-Aaay dios que rico mi amor, que rica boquita, me encanta meterte el pito en tu boquita, Peque.
Mientras bombeaba suavemente y con una mano acariciaba su pelo o guiaba mi pene y con la otra grababa todo.
-Te gusta bebé? Te gusta el pito del tio? Es para vos, mi amor.
-Que lindo es tener mi pito adentro de tu boquita, mi amor, te adoro.
-Ahora el tio te va a dar la lechita, hermosa.
-¿Te vas a tomar la leche de mi pito, Peque?
Ella seguia sin responder y yo me calentaba mas al escucharme.
-Ahi viene la lechita, mi amor
-Ahi viene la leche, bebé.
tragatela toda.
-Ahi viene! Ahi viene!
-Aaaaah, aaaahh.
aaay mi amooor, aaah, toma la lechita, bebé.
tomá.
Tragatela que espara vos.
Y ahí se la empuje un poquito pero se atragantó y se la saqué.
Y salio algo de leche, pero se ve que algo se tragó.
Me asusté por si habia despertado.
Corté el video y le limpié la boca y me fui aterrado a mi habitacion.
No dormi en toda la noche por el miedo y al amanecer me fui al trabajo antes que todos despierten.
No me pude concentrar en todo el día. La falta de sueño y el temor de que la peque dijera algo me estaba jugando en contra en mi cabeza.
Pero cuando llegué a casa todo parecía estar normal, Sol me recibió bien y cuando mi sobrina me sonrió y me volvió el alma al cuerpo.
La cargué y le dije:
-Hola bebé, pasaste bien la noche?
-Si, Tio, y vos? me dijo mientras me abrazaba.
-Yo la pasé re bien Peque, me encanta que tenerte acá en casa...
Fin

Crianza de una ninfómana
1 de febrero de 2025 en Relatos SDPA, Jovencitas, Incesto, Zoofilia
Hola mi nombre es Carla, tengo 15 años y les contare como es que mi papi me crio como una puta.
Comenzare a contar-
Desde que tenía 4 años era muy caliente, me gustaba verle las vergas a mis primitos más chicos, a mis tíos que avises los espiaba para verlos, también en una ocasión me encontré a mi prima Alexa de 8 años mientras le chupaba la verga a mi papa en el baño.
La primera verga que prove fue la de mi papa una vez que mi prima Alexa se vino a quedar conmigo en una pijamada a jugar, mi papa en medio de la noche se metió a nuestro cuarto todo oscuro para que Alexa le chupara la verga, me despertaron los quejidos de mi prima que estaba siendo penetrada por mi papi yo quede viendo ese espectáculo hasta que mi papi se quedó dormido en el piso con mi prima yo me levante para liberar la verga de mi papi de su boxer para poderla ver y tocarla, esta se puso grande y dura, de pronto se me ocurrió probar su sabor, comencé a darle besitos en la punta, luego fui chupando, en mi boquita solo cabía la cabeza de la verga de mi papi que era enorme alrededor de 32 cm, pero yo con eso me daba por servida, sabia un poco salado pero sabroso, de ponto sentí que la verga comenzó a palpitar y sentí algo caliente en mi boca, era semen, mi papi se había corrido en mi boca, entonces trague toda la leche que pude, le subí el bóxer y me fui a dormir.
A los 5 años, crecí poquito ay que tenía mi culito resignadito, mi papi se dio cuenta que en las noches le chupaba la verga así que en vez de castigarme me dejaba chuparle la verga cuando yo quisiera, pero no me bastaba, así que me hice novia del jardinero que trabajaba en la casa, era un muchacho de 21 años muy guapo y cariñoso, a él le chupaba la verga y se venía en mi boca cuando mi papi no estaba en la casa no la tenía tan grande como la de mi papi pero tenía dos verga para mi solita.
A los 6 años, crecí un poquito más ya que mi nalguitas estaban más grandecitas y comenzaron a salirme los pechitos, fue cuando perdí la virginidad, en una ocasión cundo encontré a papi penetrando a una de mis primas de Zara de 10 años yo le reclame a mi papi que porque no me penetraba a mi, mi papi accedió y me empino para comenzar a chupar mi panochita, cuando estuve caliente me empezó a restregar su vergota con mi panochita y comenzó a meterla lentamente, era mucho dolor pero me aguantaba, entonces logro meter la cabeza y fue cuando el dolor de comenzó a convertir en placer, su verga comenzó a entrar lentamente, solo entro un cuarto de su verga, comenzó a bombear lentamente hasta que se corrió dentro de mí, entonces de mi panochita comenzaron a salir chorros de semen combinado con mis fluidos y sangre. Después me senté sobre su verga y la comenzó a cabalgar, en el primer orgasmo que tuve me desmaye, desperté como a los 20 minutos con la verga de mi papi dentro de mi panchita, el seguía cogiéndome, se volvió a correr dentro de mí. Después de la cogida de mi papi dure una semana lastimadas, no podía caminar bien, pero mi novio el jardinero siempre venía a darme mi ración de verga, cuando me compuse pude coger con mi novio.
A los 7 años en una ocasione mientras estaba cogiendo en el jardín con mi novio el jardinero nos encontró mi papi el no dijo nada solo se puso en frente de mi mientras mi novio me estaba penetrando como nunca por mi rajita, mi papi se sacó su verga y me pidió una mamada, hice mi primer trio con mi novio y mi papi, estuvimos como dos horas cogiendo, hasta que me dejaron llena de leche mi rajita y mi boca, cuando me fui a mi cuarto sentía como me escurría por mis piernas por lo llena que me dejaron.
A los 8 años, ya tenía unos pechitos notables y un culito que a mi papi le encantaba es por eso que lo rompió, en una ocasión que trato de meter toda su verga en mi rajita (solo me entraron 15 cm) mi papi ya me avía dejado agotada que no me podía mover, fue cuando me dijo que tenía ganas de mi culito, entonces me puso boca abajo y comenzó a tratarme de penetrar por el culo, puso la cabeza en mi anito y comenzó a presionar, logro meter la cabeza (era un dolor monstroso, pero no me podía mover) y luego logro meter la mitad, yo estaba llorando, pero después de 30 min eso se convirtió en placer, después de 20 min se corrió dentro, ese mismo año me conseguido otro novio este era un negro de 28 años que trabajaba de maestro en mi escuela, para convencerlo de que me pasara lo seduje y lo deje que me cogiera con su verga de 28 cm, durante ese mismo año me comenso mi regla cuando le dije a mi papi él no me dejo sola durante todo un mes y me cojia en donde fuera (en el carro, en la casa, en la escuela, en su oficina) no dejo ni que viera mis novios me tocaran durante ese mes pero no lo necesitaba ya que mi papi me llenaba mi rajita a cada rato con la intención de dejarme embarazada.
A los 9 años, tuve mi primera experiencia zoofilica, cuando tenía 4 meses de embarazo apenas se me notaba mi pancita pero mis pechos crecieron mucho y ya podía coger con mis novios, en una ocasión mientras que estaba cogiendo con mi novio el jardinero me dejo tan cansada y con mi culito bien abierto que me quede en el jardín abierta de piernas en eso que llega uno de nuestros perros (una gran danés) y me empieza a dar lengüetazos en mi culito que se sentía tan rico, después trato de montarme y de un solo caderas le atino a mi dilatado culito y me enterró toda su verga de perro, durante 10 minutos estuvo bombeándome hasta que se quedó abotonado unos 20 min inundándome con su leche (yo sentía que me partía con su verga), mi papi me encontró tirada en el jardín y con el perro pegado a mi culito, venía con mi prima Alexa ya de 14 años y con una niña de 3 años, ellos solo se sentaron y vi como mi prima y la niña le chupaban la verga a mi papi mientras yo todavía tenía la verga del perro en mi culito, al final del año di a luz a un niña que llamamos Fatima que se convertiría en otra de las amantes de mi papi.
Cuando cumplí 10 años, ya era toda una imana de hombres, gracias al cuerpo que desarrolle después del embarazo que mi papi me dio, desarrolle unos pechos llenos de leche que para mi edad eran inconcebibles, lo cual me ayudaba mucho para conseguir con quien pasar un rato, me gustaba mucho conseguir hombre mayores ya que me recordaban mucho a mi papi y también porque son lo que tienen la vergas más grandes, siempre escogía a desconocidos para llevármelos a la escuela y terminar en el baño con mi culito bien lleno, me entere que tengo una hermana mayor de nombre Saray de 15 años al parecer fue la primera hija de mi papi pero vive con su madre y cuando vino a la casa mi papi le está metiendo sin control toda su verga cuando los vi nos presentó mientras mi hermana gemía y decía que lo avía extrañado.
Después de 2 meses de mi cumpleaños número 11 fui “violada”, una de las veces que estaba sola en la casa con mi niña Fátima, ya de noche no tenía con quien quitarme las ganas de ser poseída así que metí a dos de los perros que cuidan el jardín a la sala para que me montaran y valla que me encanta se ternaban muy bien y me dejaban llenita mis orificios, de repente se escucharon unos pasos por la cocina los perros todos cansados se salieron y yo con miedo solo me puse mi tanguita y fui a revisar me encontré con tres ladrones, uno de ellos me agarro de la espalda, yo solo les dije que no me hicieran daño, todos me rodearon y se sacaron sus vergas obligándome a chupárselas y tragar toda su corrida, yo en vez de oponerme lo disfrutaba, cuando menos acorde tenia a uno de los ladrones en mi culito y otro en mi rajita mientras uno me inundaba mi boca de leche, al ver mi cara de placer uno de los ladrones saco su verga de mi raja y comenzó a meterla en mi culillo mientras que ya tenía la de otro de los ladrones, sentía que me partían en dos yo me perdí en el placer solo gemía y jadeaba. Cuando amaneció me encontraba en la cocina tirada llena de leche hasta en los oídos y con un pepino en mi culo que tenía una nota enterrada “regresaremos por más” yo solo me levante y tome las pastillas que mi papi me dio para no quedar embarazada.
En mi cumpleaños número 12, tuve mi primera reunión familiar o se podría decir que fue mi primera origina familiar para celebrar mi cumpleaños, entre los invitados se encontraba el papa de Alexa (mi tío) mi prima Alexa de 16 años con su niño Joaquin de 6 años, otro tío acompañado de mi prima Zara de 16 años y su enorme pansa de 7 meses de embarazo, mi hermana Saray que estaba embarazada de mi papi de nuevo con su niña que no conocía Valentina de 7 años, un primo de 14 años de nombre Esteban, otros dos tíos que tenia tiempo si verlo desde que me cogieron cuando estaba embarazada, y unas niñas gemelas Jani y Tani ambas de 5 años (me entere que son hijas sobrinas de mi papi que tuvo con su hermana), mi fiesta comenzó cuando mi papi entro con mi pastel que era el niño joaquin volteado de cabeza en un sillón con una enorme vela enterrada en su culito cubierto de betún, cuando le saque la vela note que era enorme como de 18 cm y con forma de verga, cuando menos acorde está rodeada por mis familiares mis tíos me rompían mi culito y llenaban mi vientre al mismo tiempo que ordeñaban mis pechos, antes de perder toda cordura pude ver a mi papi con una las niñas gemelas las cual me sorprendió ya que podía soportar gran cantidad de verga de mi papi en su rajita diminuta y la otra gemela esta con dos de mis tíos que le estaban destrozando su culito y rajita la niña solo tenía la mirada perdida y lágrimas en la cara, el niño Joaquín estaba siendo violado brutalmente por mi primo Estaban y mis otras primas estaban o con cualquier otro familiar, lo que si recuerdo bien es que desperté por uno de los gritos de placer de mi padre que se estaba corriendo en Tani mientras que Jani besaba a su hermana yo apestaba a semen y podía ver claramente como salía de mis orificios, fue mi mejor reunión familiar.
Antes de cumplir los 13 años día a luz a otra hermosa niña que le dimos de nombre Alicia ya que quede embarazada en mi cumpleaños pasado pero esta vez no sabía quién era el padre, pudo haber sido cualquiera de mis tíos mi primo incluso pudo a ver sido de mi papi de nuevo, a mi papi no le importa mientras sea familia, mientras yo guardaba reposo Fatima con sus 4 añitos empezó aprender el arte del sexo de su papi, podía ver como mi querida niña chupaba la enorme verga que le concedió la vida y como su papi abuelo explotaba en una corrida en su boquita mientras que ella tragaba todo lo que podía aunque siempre terminaba bañada por la gran cantidad de semen , no me sorprendió que no le desagradara el sabor y el olor ya que venía consumiendo el semen de mi papi desde que era una bebe incluso en las comidas ordeñaba a mi papi para darle como postre a mi niña la leche paterna como si fuera natilla, lo que si me preocupo un poco son las perlas anales que a mí me solía enterrar en mi culito cuando tenía 6 años (eran 7 perlas que daban 12 cm de largo) mi papi solo me dijo que su hija tenía que superar a la madre y que además su niña tenía que ganarles a las gemelas, y con mucho cuidado mi niña con sus 4 añitos le entraron todas las perlas que a mí solo me cabían a los 6 años, mi papi solo le dijo que no se las podía sacar ni siquiera cuando estuviera dormida a menos que fuera al baño. La pequeña se hiso adicta a la verga y leche paterna a tal grado que cuando mi papa se iba a trabajar ella se iba con él y llegaba apestando a semen, fueron 4 meses de esa rutina de ver a mi niña con la perlas anales queriéndosele salir de su culito hasta que mi papi decidió que ya estaba lista para romperle su culito, primero le metió una capsula por su culito que provoco que mi niña se excitara mucho aflojándole todo el recto, de un solo jalón su papi-abuelo le saco todas las perlas, y comenzó a lubricarse la enorme verga (mi papi es dotado 32 cm de verga) con los jugos que salían de la pequeña vagina de su hija-nieta y fue metiendo poco a poco en el culito hasta casi llegar a media verga la niña solo gemía con los ojos perdidos en el placer mi papi comenzó un mete saca lento aumentando la velocidad, a los 10 minutos nuestra hija tuvo su primer orgasmo que provoco que mi papi se excitara mas perdiendo la cordura embistiendo a su hija sin piedad e inundando con su corrida todo el recto de mi niña, al sacar lo que probablemente fueron 15 cm de verga llena de leche y algo de sangre del culito de Fatima, se le podía ver el enorme hueco que había dejado el tremendo miembro de su primer hombre, mi papi un no satisfecho voltio a verme y sin pensarlo me abrió las piernas y de un solo intento trato de meter casi toda su verga en mi rajita y yo todavía no me aliviaba ya que todavía tenia una creatura en la pansa que parecía que mi papi se la quería coger dentro de mi ya que aun a mis 12 casi 13 años no me cabía toda la verga de mi papi por mi rajita, Fatima duro casi un mes sin poder caminar ya que nuestro papi no la dejaba recuperarse por completo a cada rato le sacaba las perlas anales y le metía lo que podía de verga en su dilatado culito dejándola llena de leche calientita, mi papi le decía que era su medicina para que sanara bien su colita.
A mis 14 años mi papi estaba muy ocupado con Fátima la tenía pegada a cada rato incluso cuando manejaba la tenía sentada en sus piernas con su verga enterrada en su culito hasta se la pasaban dando vueltas a lo tonto nomas y según Fátima estaba aprendiendo a manejar, para compensar el tiempo que estaba sin mi papi lo aprovechaba quedándome con mis tíos que casi siempre me venían para saciar mi ansia de ser llenada por mis orificios, casi siempre venia el papa de Alexa con Joaquín que era uno de los hijos de mi papi con mi prima Alexa, pero Joaquín prefería tener una verga en su culo que usar la suya pero con la calentura del sexo hacíamos un trio con mi tío, yo y el, un mes después mi papi quiso que viera como le rompería la rajita a Fátima con tan solo 5 años(eso a mi me lo hiso a los 6 años y solo entro 8 cm), fue todo un espectáculo como mi niña lloraba de placer por tener la verga casi 13 cm de verga de su padre, en ese momento lo tuve que admitir mi papi prefiere a las niñas y ya solo me ocupaba para fabricar mas niñas para que el pudiera cogerlas, así que decidí mudarme a la casa de mi tía Ana que es la mama de la niñas gemelas, mi tia tenia hombre de sobra los cuales con gusto compartía conmigo, pero con lo que no contaba era que las gemelas se fueron el mes que yo estuve con mi tía con mi papi, asi que fuy a visitarlo y me encontré en plena orgia a mi papi con Fátima, Jani y Tani todas estaban con las piernas escurriéndoles de la corrida de nuestro papi y Fátima montada con un poco más de la mitad de la verga de nuestro progenitor con la mirada perdida gimiendo como una pequeña perra en selo al ver esa escena como venía con mi tío (el papa de Alexa) le roge que me cogiera lo cual sin discutir lo hiso.
En el año en que cumplí 15 años, me mude permanentemente a la casa de mi tío (el papa de Alexa) se llama Alonso 43 años también esta dotado no tanto como mi papi pero me satisface muy bien además que no es celoso abecés me encontraba con extraños o con mi hermanito Joaquín en la puerta de la casa en plena faena y se nos unía al final quede embarazada pero me asegure que esta vez fuera un hijo de mi papi, lo tuve que atacar llegando a la casa mientras que dejaba a mi tío con las niñas para que las entretuviera mientras yo me aseguraba que papi me dejara bien preñada, por fin pude tener casi toda la verga de mi papi dentro de mi rajita pero me sorprendió que cuando me la metió en mi culito desapareció por completo esos 32 cm de verga que me dieron la vida estaban en lo más profundo de mi cuerpo inundando mis entrañas con su semilla que pronto me dejaría para dar otra vida la cual dará vida a otra vida de su mismo progenitor, cuando mi papi termino de llenarme mi vientre asegurando que quedara embarazada me conto que empezó a darle hormonas a las niñas para que comenzaran con su periodo antes de tiempo y que Jani y Tani se quedarían a vivir con él hasta los 12 años, las dos niñas ni siquiera habían comenzado su periodo pero al mes mi papi le hiso una prueba de embarazo las dos gemelas estaban preñadas, ese día papa invito a mis tíos y primos para que cogieran a las recién embarazadas.
Actualmente tengo 15 años ya tuve dos niñas que son mujercitas de nuestro padre ya que me encanta verlas chupar o acariciar la verga que un día les dio la vida y que un día en un futuro las dejara panzonas y tengo un niño que algún dia esperare sea un semental como nuetro padre, aveses despierto en la casa de hombre que apenas conozco llena de sus corridas y en la escuela soy la puta de los profesores y de la familia.
Fin

Extraños placeres, Parte 02 (Final)
1 de febrero de 2025 en Sexo en grupo, Relatos SDPA, Incesto, Jovencitos, LGBTQ+, BDSM
Nos levantamos mi esposa, mi hijito Tomás y yo, nos dimos un beso de buenos días y besamos también al pequeño hermoso de Tomás en sus labios, y nos fuimos a la cocina a preparar el desayuno. Mientras mi esposa y yo lo preparábamos, le dijimos a Tomás que fuera a despertar a su hermano Gastón con un fuerte golpe en su pene y sus bolas. El niño subió a la habitación y comenzó a pegarle bajo las sabanas en sus pequeñas bolas. Gastón comenzó a gritar y llorar, en eso llegan a la cocina ambos niños, y Gastón llorando decía: “Mamá, papá, Tomás me pegó en mi pene.” En eso Tomás responde inocentemente: “Yo no hice nada.” Mi esposa responde: “Seguramente son inventos de este niño tonto, ahora deja de llorar o te abofetearé hasta que sangres.” Gastón dejó de llorar inmediatamente. Nos sentamos a desayunar los 4, mientras que mi esposa y yo solo bebimos un café con una tostada, a Tomás le preparamos una taza de leche y yogur con cereales, mientras que a Gastón, solo le dimos una taza de leche casi fría.
Luego de desayunar, los niños fueron a ponerse su traje de baño y nos fuimos al patio de la casa, a nuestra piscina.
Los niños se bañaban tranquilamente en la piscina, mi esposa y yo estábamos a un costado mirándolos, mientras que una mano de mi esposa me masturbaba.
Desde lejos veíamos como Tomás molestaba a Gastón y le daba empujones contra el agua, y Gastón con cara de estúpido, porque eso es lo que es, se defendía.
Pasaban los días, y cada noche, mi esposa, yo y Tomás jugábamos en nuestro dormitorio, probando nuevas experiencias, poco a poco fuimos utilizando productos de nuestro pasado, poniéndole esposas en sus manos, mientras lo masturbábamos o se le penetraba analmente, o también le vendábamos los ojos, y le hacía mamar mi pene o lamer la vagina de mi esposa, pero nunca nada violento con él, siempre suavemente y con mucho amor. También con el pasar de los días el comportamiento de Gastón fue empeorando, no obedecía, en reiteras ocasiones hacía destrozos por la casa, golpeaba a sus compañeros del colegio y con mi esposa estábamos harto de él, hasta que después de meditarlo varias veces, ambos ideamos un plan.
Al día siguiente, estábamos mi esposa y yo en la casa, suena el teléfono, y era desde el colegio, que nos avisaban de que Gastón había roto 2 ventanas jugando a la pelota. Esa fue la gota que rebalsó el vaso. En ese momento le conté a mi esposa la situación y le dije hiciera lo que teniamos planeado. Mientras yo fuí al colegio a retirar a Gastón y de paso me traje a Tomás también. Los niños se subieron al auto, Tomás en el asiento de co-piloto y Gastón atrás. Saludé amorosamente a Tomás y le dije a Gastón “supe lo que hiciste hoy en el colegio.” Gastón me responde: “Papá, es que…” Y sobre el mismo instante me di la vuelta, y apreté fuertemente a Gastón del cuello (como lo hace Homero Simpson con Bart) y le dije “cállate, cállate, porque hoy te las verás cuando lleguemos a casa.”
Cuando llegamos a casa, nos sentamos a almorzar los 4, sin dirigir ninguna palabra a Gastón, mientras que Tomás nos conversaba a mi esposa y a mi. Al finalizar, mi esposa fue a decirle a Tomás que se quedara tranquilito en el living de la casa viendo televisión, le dejamos sus juguetes y un envase con helado, que nosotros estaríamos con Gastón en el dormitorio, y que saldríamos dentro de un rato y que no se preocupara por lo que ocurriera.
Yo tomé a Gastón de un brazo y mi esposa venía a mi lado, entramos al dormitorio y cerramos con pestillo. Todo el dormitorio estaba cubierto con plástico, la cama también y el suelo. Mi esposa le da un fuerte empujón a Gastón y le dice “que carajos ocurrió hoy en el colegio?” Gastón intenta responder, pero luego yo le lanzo un fuerte puñetazo en toda su boca, en donde cae al suelo y comienza a llorar. Entre mi esposa y yo, le gritábamos cosas como “nos tienes harto”, “tienes un comportamiento de mierda”, “no sabemos como mierda te hemos tolerado estos 6 años”, el niño solo lloraba en el suelo, mientras mi esposa le pegaba patadas, yo continuaba pegándole fuertes puñetazos su boca y la cara. Con los puñetazos, logré que el niño sangrara por su boca y de paso, se le cayeron 3 dientes, mi esposa le dice “párate, párate ahora”, el niño con pocas fuerzas se levantó del piso, y mi esposa le responde “miren quién se levantó”, y en eso, deja caer un fuerte bofetón en su cara. Lo acostamos en la cama, mi esposa saca del mueble un consolador y yo le digo “ponte en 4, hazlo ahora”, el niño lo hizo, mientras seguía llorando y sangraba por su boca, en eso mi esposa introduce sin piedad el consolador en el pequeño ano del niño. Un fuerte grito dejó escapar el pequeño, mientras mi esposa le decía “que tal eso?”, “ahora estás llorando y obedeciendo?”, mientras mi esposa seguía metiendo y sacando el consolador, yo jalaba fuertemente el pelo del niño. Al cabo de unos minutos, el niño comenzó a sangrar por su ano. El niño entre lágrimas decía “me duele mamá, déjame papá, déjenme”. A nosotros solo nos provocaba más ganas de lastimarlo. Mi esposa lo ahorcaba, yo le pegaba en su estómago, jalábamos sus pequeños testículos, hasta que decidimos que debíamos darle su final. Una pequeña soga colgaba del techo, lo montamos y le dijimos “hasta nunca, estúpido”, hasta que la soga hizo el resto del trabajo, le quitó la respiración, sus piernas se meneaban para todos lados, y al cabo de unos minutos, Gastón, si, el hijo que nunca quisimos y que siempre fue un estorbo, murió. Con mi esposa nos miramos, y una alegría enorme recorrió toda la casa, nos comenzamos a besar, e hicimos el amor en la cama, donde hace unos minutos, maltratamos a nuestro estúpido hijo.
Pero aún no terminaba todo, el niño colgaba del techo, salí del dormitorio y fui al garage a buscar una sierra, volví al dormitorio, mi estaba tenía al niño tendido en la cama, y comenzamos a descuartizarlo, yo corté sus piernas, mientras que mi esposa cortó sus brazos y su cabeza. Yo fui al patio de la casa a preparar el fuego, mientras que mi esposa se quedó sacando todos los plásticos del dormitorio. Primero quemamos los plásticos para eliminar toda la sangre, y luego tiramos los restos del niño descuartizado, agregábamos más gasolina, hasta que al cabo de unas 3 horas, eliminamos todo resto del niño, quedando solo sus huesos.
Volvimos al living de la casa, en donde se encontraba Tomás, mi esposa lo besó fuertemente y luego yo, y le dijimos que Gastón nunca volvería a molestarnos, y el niño de gritó de felicidad. Al día siguiente empacamos nuestras cosas, nos deshicimos de los huesos del niño en un lago durante el camino, y comenzamos una vida nueva, al norte del país.
Fin

Crónicas de un profesor, Parte 02 (de El teacher)
1 de febrero de 2025 en Relatos SDPA, Jovencitas
Como ya se había hecho costumbre, Valeria todos los recreos entraba a mi salón de clases y siempre hacíamos travesuras que comenzaban con besos que poco a poco fueron mejorando, ya que ella no sabía besar pero poco a poco fue aprendiendo.
Siempre que ella llegaba la pasábamos muy bien, no pasábamos de sexo oral el uno al otro porque la ocasión y el lugar no lo permitían. Cierto día la mamá de Valeria llego a platicar conmigo. Cuando yo la vi me asuste ya que pensé que se había enterado de algo o había notado algo raro en la nena puesto que un día de tan excitado que estaba le pague una buena mordida en la pierna que se notaba mucho. Pero para mi suerte, no era ese el caso. La señora nada mas quería saber porque la nena iba mal en la materia de ingles porque la niña era pésima para el inglés. Por eso la mamá me pidió de favor si podía ir a la casa de ella y darle un refuerzo privado a la nena. La palabra "refuerzo privado" resonó en mi cabeza como una oportunidad de llegar mas lejos con la nena, a lo mejor penetrarla que era lo que tanto quería. Luego de que la mama me lo pregunto, yo le dije que sí, que llegaría ese día a las tres de la tarde. El único inconveniente para ella, pero ventaja para mí era que ella trabajaba desde la 1 de la tarde hasta las 10 de la noche y que Valeria solo se quedaba con su hermana mayor, la cual luego contare lo que paso. Anhelaba que llegaran las tres de la tarde. Maquinaba en mi cabeza todo lo que podría hacer con Valeria estando solos en su cuarto.
Al fin la hora llego, fui a la casa y toque el timbre, me abrió la puerta una linda niña, chinita, blanquita con un gran cuerpazo. Era la hermana de Valeria, de unos 14 años. Muy deliciosa, pero como les dije luego contare eso. La niña me dirigió a el cuarto de Valeria y entre, la nena estaba lista, muy coqueta como esperándome para excitarme. Estaba con un short negro de lycra muy cortito, una camisa blanca de tirantes en el cual se veían sus tetitas. Llegue y cerré la puerta con seguro, ya que yo sabía a lo que iba. La nena se paro, me abrazó por el cuello y me dio un gran besote y me dijo:
- Sabe, lo estaba esperando.
- En serio, mi amor. Le respondí.
- Sí, me dijo. Y tengo una idea excelente. Porque no nos damos un baño juntos.
Eso me éxito tanto y le dije que fuéramos que yo me adelantaba y que ella llegara después. Me desnude y entre al baño, después llego ella desnudita tanto que no pude resistir, la abrace contra mí, rosando mi pene en su vientre ya que como era pequeña hasta ahí le llegaba mi pene. El agua comenzó a correr, le di la vuelta y le comencé a besar el cuello, a tocar sus tetitas hasta bajar a su pancita y luego a su vientre. Le di la vuelta, la arrodille y me la comenzó a lamer como nunca lo había hecho, ella estaba tan caliente y lo notaba por la forma en que me la mamaba. Luego le dije:
- Es hora de que me des tu virginidad princesa.
Nos salimos de el baño y fuimos a la cama, cuando ella se acostó, abrió las piernas y le metí mi leguita en su vaginita sin ni un pelito, muy carnudita y coloradita y morenita. Luego me dijo:
- Siéntese, le voy hacer algo que vi que mi hermana le hacía a su novio.
Me senté y me comenzó a masturbar pero con sus lindos y hermosos pies de niña, enserio casi me hizo venir, sus pies eran tan lindos, morenitos, rosaditos, suavecitos, calientitos, gorditos, una sensación que no puedo explicar llego hasta mi pansa, algo que jamás había sentido. Luego de eso la hice que parara sino me iba a venir.
Luego procedí a lo que tanto quería, abrí sus piernas y comencé a rozar la cabeza de mi pene en su vagina y comencé a empujar suavecito cuando ella menos se lo espero di un empujón y no sé cómo mi pene entro enterito, a lo cual pego un grito muy fuerte a lo cual le tape la boca, cuando de pronto tocaron la puerta, era la hermana de Valeria.
- Vale? Qué pasa?
Yo le dije que le respondiera que nada y ella me obedeció, le dijo que estábamos viendo un video y que ah habían gritado, ella se fue conforme. Yo seguí con mis movimientos de mete y saca con tanta excitación.
- Me duele profe, ya no, sáquemela. Me voy a morir. Me suplico.
- Aguanta bebe que si te morís va a ser de placer, le dije.
Tal y como le dije ella comenzó a excitarse, poco a poco me pedía más, incluso me dijo:
- Ahora yo encima.
Se me subió encima y se comenzó a mover de una manera tan excitante, parecía batidora como se meneaba de rico hasta que casi me hace venir cuando la pare ya que no quería terminar todavía porque me faltaba una posición.
- Ahora de perrito, le dije
La puse en cuatro y la comencé a culear cada vez más fuerte, le pegaba nalgadas y ella pujaba tan rico, yo solo veía esos pies tan deliciosos que tenia cada vez mas coloraditos. Le saque el pene y le dije que me hiciera el footjob (que me la pajeara con sus lindos pies) y así lo hizo hasta que ya no pude mas y me vacié en sus lindos y rosados piececitos lindos.
Luego de todo la abrace, le di muchos besitos y me vestí para irme a mi casa, ella se fue a darse un baño, caminaba algo raro pero era normal. Cuando iba saliendo me encontré a la hermana de Valeria y me dijo:
- Que tal estuvo la cogida con mi hermana?
Quede helado con la pregunta que me hizo, como sabia de lo que había pasado? Que iba a hacer? Me iba a delatar? De seguro si.
Continuará

Abandonada, Parte 04 (Final)
1 de febrero de 2025 en Relatos SDPA, Jovencitas, LGBTQ+
Despierto después de un rato. Aún tengo entre mis brazos al desnudo cuerpo de Alicia, la cual duerme profundamente, con una sonrisa en su boca. Con mucho cuidado, salgo de la cama, saco una sábana seca del clóset y la cubro con ella. Voy al baño y tras vaciar mi repleta vejiga, me veo al espejo. Realmente me veo distinta. Lo que acababa de pasar hace un par de horas en mi cama fue la experiencia más maravillosa de mi vida. Comienzo a llorar. Llorar de alegría, porque Dios me permitió encontrarme con ésta frágil y hermosa ángel que duerme desnuda en mi cama. Salgo del baño, y me acuesto junto a mi joven amante. Al sentirme, me abraza y se acurruca en mi pecho. Así quedamos dormidas el resto de la noche.
Al día siguiente el Sol parece relucir con más brío, los pájaros parecen cantar más lindo, el aire se respira más limpio. Abro los ojos y recuerdo que no estoy sola. No. Tengo a la más dulce de las compañías a mi lado. Con dulzura, le doy un beso al tiempo que la despierto. La niña abre sus hermosos ojos, y sonriendo me da los buenos días.
Como un par de niñas (bueno, ella técnicamente lo era) nos metemos al baño juntas, jugando. Nos metemos bajo la ducha para asearnos y refrescarnos. Comenzamos, de nuevo, con nuestros juegos. Al principio eran juegos normales, pero se fueron haciendo más y más sensuales. Hacer el amor bajo la ducha fue una nueva experiencia, igualmente mágica que la de anoche. Nuestros cuerpos enjabonados frotándose entre nos ofrecieron una gama de sensaciones sumamente eróticas y placenteras. Tras un buen rato bañándonos y tras no sé cuantos orgasmos, salimos hambrientas de la regadera, nos vestimos, ella con un suéter de manga larga y unos pantalones sumamente entallados multicolor, y yo con una minifalda de mezclilla y un top, y fuimos a desayunar. De nuevo, no acudí a clases. Seguramente todos en el salón creeían que era debido a que estaba deprimida por mi boda cancelada. Nada más distinto a la realidad. Lejos de sentirme deprimida, me sentía feliz, contenta, llena de energía y gusto por la vida. Alicia fue la que hizo ese cambio en mí.
El día transcurrió con normalidad. Desayunamos en un pequeño restaurante, tras ello fuimos a una plaza comercial a mirar los aparadores, pero terminamos comprando varias bolsas de ropa y accesorios. Comimos una deliciosa paella en un pintoresco restaurante español y paseamos por las calles de la ciudad, siempre tomadas de la mano, disfrutando del estar vivas. Alicia me dice de pronto: – Me gustó mucho lo de anoche Ari… me gustó el hacerlo contigo… y dormir contigo -. Tenía ganas de besarla, pero me contuve y sólo la abracé, al tiempo que le digo: – a mí también me encantó todo lo de anoche, de hecho me gustaría que ya durmieras todas las noches conmigo, ¿que dices?-. La niña asiente encantada. – Y también tendremos que pasar toda tu ropa al clóset de nuestro cuarto, ¿verdad?-. La niña me abraza, llorando de alegría. Nuestro cuarto. Ya no éramos ella y yo por separado. Ya éramos nosotras.
Ya eran casi las dies de la noche, los antros del centro de la cuidad comenzaron a llenarse, a pesar de ser lunes. Decidí que mejor regresaríamos a casa a descansar. Cuando cruzábamos por uno de ellos, me pareció ver algunas caras familiares. Parecían varios de los amigos y amigas de Jorge. Me puse algo nerviosa. Primero porque venía tomada de la mano de Alicia. Segundo, porque Jorge no tomó muy bien el rompimiento y tenía tendencia a ser algo violento. Tercero, por la circunstancia anterior, temía que lastimara a Alicia.
Cruzamos enfrente de dicho antro. En efecto, eran los amigos de Jorge, bebiendo en pleno día laboral. Seguramente allí estaba él, pero no quize voltear. Tras dejar el establecimiento detrás, suspiro de alivio. Alicia lo nota y me pregunta si me pasa algo. Le digo que no, que todo está bien. Ella me toma del brazo y vamos así, caminando juntas hacia el estacionamiento. En eso, oigo un grito detrás de mí: – ¡Regrésate maldita puta! A mi nadie me deja así cabrona, ¡ven o voy por tí!-. Mi corazón se aceleró, y volteo a ver. Si, era Jorge, quien venía, con copa en mano, hacia mí. Varios de sus amigos y amigas lo seguían, riéndose. Llega conmigo y comienza a gritarme: – ¡No te voy a dejar ir perra, tú eres mía y siempre vas a ser mía, y por mis huevos que así va a ser por la buena o por la mala! -. Realmente estaba asustada. Jorge estaba obviamente pasado de copas y sumamente enojado. Instintivamente me pongo enfrente de Alicia, protegiéndola. – Cálmate Jorge, no hagas una escena, ya te dije todo lo que tenía que decirte y sigo en pie con lo del rompimiento. Ya no te necesito, entiéndelo por favor -. Mis palabras fueron apagadas nuevamente por sus gritos: – ¡Cállate! ¿!Que ya tienes otro o qué pinche puta!? -. En eso ve a Alicia. Mi corazón estaba al mil por los nervios. La pobre estaba detrás de mí, asustada, casi llorando. – !Y quién es ésta pinche niña!- dice al tiempo que trata de sujetarla. Con eso, me le puse enfrente tratando de detenerlo. Al no permitirle tocar a Alicia, su frustración llegó al máximo y me aventó, con lo cual caí estrepitosamente. Volteo a ver a Jorge quien se dirige hacia mí. En ese momento deseé haber tomado las clases de karate cuando era niña en lugar de las clases de ballet. Se veía sumamente enojado, me arroja su copa, pero logro esquivarla. -Vas a ver cabrona, ahora sí vas a ver -. Me preparé a recibir un golpe. Pero en eso, sale Alicia y le da un puñetazo en la cara. Jorge se desconcierta ante ello, y trata de golpear a la niña. La agilidad de Alicia hace que logre esquivarlo, y le da una patada en sus pies, haciendo que Jorge se desestabilize y caiga brutalmente de cara. Ni las manos puso el bastardo.
Comenzaron las risas y burlas de sus compañeros. Se oían cosas como “te madreó una morrilla wey”, o “iii que mal pedo que te partiera la madre una niñita”. Yo estaba sorprendida. Ante la confusión, tomo de la mano a Alicia y salimos corriendo de allí. Estaba asombrada. Supongo que el vivir en la calle le enseñó una o dos cosas a Alicia. Al llegar al auto, nos miramos y nos echamos a reír. Le doy las gracias y la beso en los labios. Nos besamos más rato, cada vez más apasionadamente. La adrenalina del momento, el ver cómo Alicia me rescató y estarla besando tan sensualmente en el auto terminaron por excitarme de sobremanera. Así, arranco el auto y vamos a casa.
Me sentía demasiado excitada. Quizá fue ver a Alicia no como una linda lolita, sino como una “príncipe azul” que vino a mi rescate. El punto es que en cuanto llegamos a casa, comienzo a besarla apasionadamente, al tiempo que comienzo a acariciar su cuerpo. Llegamos a nuestra habitación y nos sentamos en la cama. Alicia comienza a meter su mano bajo mi falda, y haciendo a un lado la tela de la pantaleta, comienza a masturbarme. A mi vez, meto mi mano por debajo de su pantalón hasta acariciar sus suaves nalgas. Me sorprendió el hecho de que no estuviera usando ropa interior. Comienzo a acariciar su vulva, la cual ya estaba bastante húmeda. En eso, se me ocurre algo. Recorro mi dedo hasta el delicado ano de Alicia, el cual comienzo a masajear. Alicia parecía disfrutarlo bastante. En eso, se pone de pie y se quita la ropa, mostrándose su deliciosa desnudez. Yo también me desnudo, y me recuesto en la cama. -Ven- le digo, y la hago que se coloque encima de mí, mirando a mis pies, para formar un 69. Procedo a acariciar su delicioso trasero, lo beso, lo lamo, y también comienzo a lamer su vulva. Alicia comienza a hacerme lo mismo. Separando mis labios, comienza a lamerme mi vulva, introduciendo su lengua en mí. Estábamos ardiendo. Yo seguía lamiendo con entusiasmo la vagina de la niña, saboreando sus jugos con gusto, con su ano pegado a mi nariz, lo que me permitía inhalar su dulce aroma. En eso, decido comenzar a masajearle el ano nuevamente. Era increíble como ese pequeño anito respondía a mis caricias: se contraía y luego se relajaba abriéndose muy ligeramente. Mi lengua no puede más, y comenzé a lamerle el ano. No sé porqué me excité tanto al hacerlo. Tanto que tuve un par de orgasmos, lo cual hizo que Alicia lamiera más y más vigorosamene, al tiempo que movía sensualmente sus caderas en mi cara. Mi lengua recorrió cada milímetro y cada pliegue de su rosado anito, el cual sabía delicioso. Decidí introducir ligeramente mi lengua en él, lo cual hizo que Alicia gimiera de placer. Tras lamerle su ano, comienzo de nuevo a lamer su clítoris, pero ésta vez decidí introducir la punta de unos de mis dedos en su orificio trasero mientras lo hacía. Sentía las paredes de su esfínter apretar mi dedo vigorosamente, y comienzo a sentir que Alicia literalmente escurre de su vulva: está teniendo un intenso orgasmo. Rendida, cae encima de mí. Toma aire, luego voltea a verme y me dice: -Eso fue genial, yo también quiero probarte de allá atrás-. Así, nos ponemos de lado, para así ambas poder tener una mejor vista del trasero de la otra.
Llena de lujuria, inmediatamente comienzo a lamerle el ano, primero suavemente, luego más vigorozamente, tratando de introducirle mi lengua, mi dedo, mi cara. Ella empezó a besarme y lamer mis nalgas, y posteriormente comenzó a masajear mi ano con uno de sus dedos. La sensación era increíble, asombrosa. Había cierto morbo en el sexo anal que lo hacía extraordinariamente excitante. Cuando sentí su lengua en mi ano, me estremecí y sentí tener un intenso orgasmo. Entonces procedo a lamerle más apasionadamente el de ella, haciendo que se viniera ota vez, y otra, y otra, y no sé cuantas veces más. Igualmente yo, sentía un orgasmo tras otro. Tras unos minutos de intensos orgasmos anales, nos acostamos una al lado de la otra, riéndonos. – ¿Somos unas pervertidas verdad? -. Me pregunta. Yo asiento, la abrazo y la beso en los labios.
Aún agitadas por el sexo, Alicia finalmente pregunta algo que seguramente tenía en la cabeza desde hace un buen rato: – Ari, ¿quién era ése que te atacó?-. Procedo a contarle mi historia. Ella escucha atentamente mientras le digo lo falsa que era mi vida antes de conocerla. Al ver que estoy llorando, la niña me abraza. – Éres lo mejor que me ha pasado Alicia, eres todo para mí… te amo como no tienes idea-. La niña me da un suave beso en los labios, y me dice: – Gracias por todo lo que me has dado Ari. Quiero estar contigo para siempre. Te amo- .
Por la mañana me desperté yo primero, y volteo a ver a mi ángel que yace junto a mí en la cama. Nunca me había sentido tan feliz. Extrañamente, lo primero que hice antes de salir de la cama fue, rezar. Casi nunca lo hago, siempre me consideré alejada de Dios, pero últimamente he tenido grandes pruebas de su amor y de su existencia, que no pude evitar darle las gracias por todo esa mañana.
El resto de la mañana transcurrió como es usual: falté (de nuevo) a clases, ésta vez decidimos desayunar en casa, jugar con Katy, disfrutar del estar juntas. Ya eran como las tres de la tarde, cuando estábamos haciendo de comer, que suena el timbre de la casa. Me sorprendí pues casi nunca recibo visitas, y cuando las tengo primero me avisan desde la puerta de acceso al fraccionamiento. En fin, tomo el interfon y pregunto quién es: era mi padre.
Algo nerviosa, voy a la puerta y lo recibo. Mi padre, quien vino solo, pasa a la casa. Le ofrezco algo de comer, a lo cual accede. En eso se percata de la presencia de Alicia, a quien saluda amablemente, y la niña, un poco tímida, hace lo mismo.
– Vine para platicar contigo Ariana- dice mi padre con voz grave. Ya oigo venir el sermón sobre la importancia de los compromisos sociales, sobre el estátus, sobre el linaje, etcétera. Pero en lugar de ello, me sorprende cuando me dice: – Sabes, hija, yo siempre te apoyaré en tus decisiones. Tu madre no comparte tanto ésta opinión, pero ya se calmará… siempre lo hace…-. Hace una pausa, toma un bocado, y continúa: – Si cancelaste la boda, tus motivos has de tener. A mí lo único que me importa eres tú. Tú siempre has sido diferente a tus hermanas, por eso vine a platicar contigo. Quería dejarte bien en claro que lo único que deseo es tu felicidad. No me importa si te casas o no, o si te enamoras de alguien pobre, alguien rico, de un hombre, de una mujer, de alguien más viejo, de alguien más joven… no me importa siempre y cuando tú seas feliz-.
Con lágrimas en mis ojos, me lanzo hacia mi padre y lo abrazo, llorando de alegría. No sé porqué dijo esas palabras. ¿Acaso sospechaba algo sobre mi sexualidad? ¿Fué porque vió a Alicia conmigo? No lo sé, y nunca me molesté en averigüarlo. Me sentía feliz de contar con el apoyo total de mi padre.
Tras comer y charlar otro rato, mi padre se prepara a retirarse. Hizo un espacio en su apretada agenda para volar desde la capital para verme, pero ahora iba de regreso para seguir con su trabajo. Antes de irme, finalmente hace la pregunta: – ¿Y puedes decirme quién es ésta adorable jovencita?- dice, mientras voltea a ver a Alica, quien sonrojada, se oculta detrás de mí. Así, procedo a contarle nuestra historia, claro, omitiendo ciertos detalles que eran o muy explícitos, o que bien aún no me sentía preparada para contarle. Mi padre sonríe y me dice: – Me da gusto que hayas encontrado a alguien que te acompañe. Pero como siempre lo he dicho: si vas a hacer algo, hazlo bien. Mañana te enviaré los datos de un juez amigo mío para que te ayude a que seas la tutora legal de Alicia. Así podrás enviarla a la escuela y ser la responsable de ella. Otra cosa más: ya no faltes a clases y por favor…- mi padre toma aire y dice: – si ése imbécil te pone la mano encima de nuevo, avísame y me encargaré de él-. Diciendo ésto, se despide de nosotras y aborda el taxi que lo esperaba en la puerta desde hace unos minutos.
¿Cómo supo mi padre de mi incidente de anoche? Nunca lo sabré. Supongo que alguien lo publicó o le avisaron personalmente. Una vez que mi padre se fue, yo tomo de las manos a Alicia y le pregunto: – ¿Oíste eso? ¿Quieres que sea tu tutora para que podamos estar juntas para siempre?-. Alicia, con los ojos llenos de lágrimas, sonríe, me abraza, me besa y me dice: – Claro que sí Ari, quiero estar contigo para siempre -.
EPÍLOGO
Pasaron varias cosas desde aquél día. Inscribí a Alicia al colegio, y yo retomé mis clases. Aún recuerdo el primer día de Alicia, se veía tan hermosa con su uniforme que no pude evitar hacerle el amor en cuanto llegó de la escuela. El convertirme en la tutora de Alicia resultó ser muy sencillo gracias a las influencias de mi padre, quien por cierto seguía manteniéndome mientras estudiaba. Una vez que me gradué, y gracias a las recomendaciones de mi padre, pude instalarme en un lucrativo puesto de negocios. Alicia también la estaba haciendo en grande. En le escuela demostró ser brillante, y si bien era tímida, era bastante energética y asertiva. Como una manera de dar gracias a la sociedad y a Dios, me asocié con Sandra e iniciamos una fundación para ayudar a los niños y niñas en situación de calle. Era mucho trabajo, pero la fundación creció cada vez más, lo cual nos llenó de satisfacción. Alicia y yo seguimos tan enamoradas como siempre o incluso más. He decidido que nunca la separaré de mí, y yo nunca me alejaré de ella. Ella fue quien llegó a mi vida y llenó ese vacío. Desde que estoy con ella, ya no me siento sola, ya no me siento apartada de todos, ya no me siento alienada, ya no me siento… abandonada.
Fin

Extraños placeres, Parte 01
31 de enero de 2025 en Jovencitos, LGBTQ+, Relatos SDPA, Incesto
Soy Marcelo, tengo 38 años, vivo junto a mi hermosa esposa Marión de 35 años y tenemos 2 pequeños hijos; Tomás de 7 añitos y Gastón de 6 añitos. Vivimos cómodamente a unos 40 minutos de la ciudad, mi esposa y yo trabajamos y mantenemos buen físico. Cuando nos conocimos con mi esposa, fuimos parte del mundo de la dominación sexual, durante alrededor de 2 años, pero luego del nacimiento de nuestro primer hijo, eso fué algo que quedó atrás. Tomás es juguetón, regalón y muy tierno conmigo y mi esposa. Él es nuestro consentido en todo. Luego, cuando nos enteramos que Marión estaba en su segundo embarazo, a ambos no nos agradó la idea de traer otro niño al mundo, y por eso, mantenemos cierta distancia con el menor. Gastón es el más travieso, inquieto y desobediente. Con mi esposa somos sexualmente activos, pero a pesar de eso, hay algo más que nos une: ambos nos excitamos sexualmente maltratando a nuestros hijitos, lo cual nos recordaba a nuestra época pasada.
Todo comenzó hace un tiempo atrás, en donde al desobediente de Gastón, se le castigaba en reiteradas ocasiones por su desordenado comportamiento y también por ser travieso. Entonces, con mi esposa tomamos otras medidas, cada vez que Gastón se mal comportaba, se le daban unas palmadas en su culito, y se le amenazaba en frente de su hermano Tomás:
-“Te has portado muy, muy mal, eres un niño malo.” Dije yo.
-“Te castigaremos, te quedarás sin televisión el resto del día, y a tu hermanito iremos a comprarle un regalo.” Dijo mi esposa.
Gastón se puso a llorar.
-“Sí! Yo quiero un juguete nuevo!” Dijo Tomás.
Nos subimos al auto, y fuimos a la juguetería. Al llegar, le dijimos a Tomás que eligiera el que más le gustara y que fuera grande. Gastón dice “yo también puedo elegir uno.” Y mi esposa responde “No!”. En eso Gastón se pone a llorar y patalear, y en ese instante tomo a Gastón y me lo llevo al auto. Llegamos al auto y le digo: “me das vergüenza, tu hermano no es así, el se comporta y es más lindo que tú. Y deja de llorar antes que te parta la boca.” Al cabo de unos minutos llega mi esposa y con Tomás y su regalo. Ya viajando a casa mi esposa y yo conversábamos con Tomás y nos reíamos bastante.
Ya cayó la noche, era viernes, cuando ya eran las 8:30, mi hermosa esposa le dice a Gastón: “ve a lavarte tus dientes, te pones pijama y te vas a dormir.” Y Gastón dice: “y por qué Tomás no se va a dormír?”. Mi esposa le pega una bofetada en la boca y le responde: “a mi me obedeces, ahora ve a hacer lo que te digo o quieres otra?.” El niño hizo lo que debía hacer y se fue a dormir.
Nos quedamos en el living, mi esposa, yo y Tomás mirando televisión. En eso Tomás dice: “papito, mañana podemos bañarnos en nuestra piscina?”. Yo le respondí: “por supuesto, mi hijo campeón.” Tomás dice: “pero lejos de Gastón, porque siempre me pega patadas y me pellizca.” Yo le dije: “tranquilo, mi hijito lindo, lo que tu debes hacer mañana, es empujarlo varias veces a la piscina.” Nos reímos los tres.
Esa noche nos fuimos a nuestra habitación, y de paso, nos llevamos a Tomás. Ya ahí dentro, todo cambió. Mientras mi esposa se desvestía, yo tenía a mi hermoso hijo entre mis brazos, no dejaba de besarle, su carita, su labios, mientras que con mi otra mano le tocaba su pequeño pene y su gordo culito. Me desnudé y de paso lo desnudé a el. Comencé a masturbarle su pequeño pene, mientras que mi esposa le estimulaba su culito. Al cabo de unos minutos, al tener ya su culito dilatado, introducí mi miembro a comencé a penetrarlo suavemente para no lastimarlo. Mientras, mi esposa lo besaba y se masturbaba con uno de los brazos de Tomás que lo tenía dentro de su vagina. La excitación era bastante, mi esposa ya se había venido y, mientras, yo estaba eyaculando dentro del gordo culito de Tomás. Retiré lentamente mi pene del ano de Tomás, mi esposa se acostó en la cama y yo tomé al niño de sus piernas y puse su culito en la boca de mi esposa y le dije que expulsara como si estuviera en el baño. Un rico chorro de blanca y calientita leche comenzó a salir del ano de Tomás y caía toda en la boca de mi esposa. En eso, el niño se acomodó en la cama y se quedó dormido.
Continuará