Inicio Activar cuenta

    blogSDPA.com

    El señor de las golosinas, relato SDPA en blogSDPA.com

    El señor de las golosinas, Parte 06 (de Falkop3d)

    24 de febrero de 2025 en Control Mental, Relatos SDPA, Jovencitas, BDSM

    Esta publicación es la parte 6 de un total de 11 publicadas de la serie El señor de las golosinas

    Al día siguiente de la cena en la finca (leer el capítulo anterior) descubrí que la hija de Yoli espiaba lo que ocurría en las habitaciones del prostíbulo a través de unos pequeños ventilas que poseían en el techo.

    Silenciosamente me le acerque sin que me notara y cuando me descubrió intento escapar; pero no pudo ya que la sujete de uno de sus brazos. La calme diciéndole que no diría nada a su madre y que ahora sabía cuál era el motivo de algunos ruidos raros que sentía en el techo.

    La niña convencida por mis palabras me sonrió pícaramente y nos presentamos. Su nombre era Lorena, tenía 13 años, su cabello era castaño, largo y lacio, sus ojos eran de color marrón y el típico cuerpo de una niña de esa edad. Pero lo que más me gusto de ella, era que poseía un pequeño lunar cerca de la comisura de sus labios del lado derecho; lo cual la hacía lucir hermosa para mí.

    Le pedí a Lorena que me acompañara a mi oficina para charlar tranquilos. Algo extrañada por mi oferta acepto y me acompaño. Al ingresar a esta; se sorprendió al ver que en esta había varios monitores de TV que reflejaban lo que sucedía en cada lugar del local, incluidos los dormitorios.

      -Se ve mejor acá – dije yo – que en los ventilas

      -Guau… si – respondió la niña –

      -Tráiganme una taza de café y un vaso de gaseosa – dije por el intercomunicador del escritorio – no tengo apuro

      -Si Pablo – se escuchó la voz de Yoli del otro lado del intercomunicador -

      -Bien Lorena – interrogue yo – desde cuando espías los dormitorios?

      -Hace 3 o 4 años – respondió – perdón

      -Cuando llegue aquí – volví a interrogar – me espiaste también?

      -Mmm … no – dijo la niña – es que me había escapado unos días

      -Bien … y por qué lo haces – dije –

      -Espiar o escaparme – respondió algo risueña -

      -Las dos cosas – dije –

    Por unos minutos charlamos tranquilamente. La niña me dijo que su actitud se debía a que deseaba experimentar cosas de la vida; cosas que su madre no le dejaba hacer por considerarla una niña aunque ella sabía todo lo que había hecho su madre anteriormente.

    El hablar y las expresiones que hacia Lorena me demostraron que para sus 13 años era una niña muy madura, inteligente y emprendedora. Pero que se sentía sola y se aburría si debía llevar la vida de una niña de su edad.

    La conversación fue brevemente interrumpida por el ingreso de su madre casi desnuda a mi despacho con lo que había solicitado. Yoli se sorprendí y se molestó al ver a su hija conmigo; pero después de aclarar la situación y de cómo Lorena estaba allí, su enojo desapareció ya que esta pensaba que su hija había vuelto a escaparse.

    Hice que Yoli se quedara y fuera participe de la conversación con su hija. Creo que la niña me veía como un confesor y hablaba atravesó de mi para explicarle a su madre sobre su conducta. La madre escuchaba y también daba sus motivos pero de frente a su hija. Lorena expreso su conocimiento sobre los pocos secreto que tenía su madre para con ella; incluyendo la identidad de su padre biológico; también de como esos secretos la hacían sentir. Yoli prometió que no guardaría ningún secreto para con su hija; como así también darle la libertad que ella deseaba. Las lágrimas dieron paso a las risas y parecía que ahora madre e hija se entendían una con la otra.

    La conversación fue larga y agotadora para los tres. Los monitores reflejaban que el local estaba lleno de cliente; pero le dije a Yoli que se tomara la noche libre para que junto a su hija fueran a su casa a descansar. La meretriz agradeció mi ayuda y mi actitud recordando lo que me había comentado cuando le presente a mis niños expreso:

      -Con o sin drogas; usando ese pijo que temes o no siempre logras lo que quieres – dijo risueña mientras abrazaba a su hija –

      -Jejejeje – reí y dije – gracias Jesica –

      -Como es eso – pregunto la niña –

      -En casa – dijo Yoli abriendo la puerta del despacho– te lo cuento, vamos

      -Bueno – dijo la niña caminado delante de su madre -

    Al día siguiente; Yoli volvió al prostíbulo parecía más relajada y con mucha energía; aunque pude ver también que poseía una ligera marcha de ojeras. La meretriz me conto que hablo con su hija sobre lo que había quedado pendiente de explicar el día anterior y que la niña quedo no solo sorprendida; sino que quedo tan excitada que tuvieron su primera relación lésbica incestuosa.

    El relato que la meretriz me hizo fue tan excitante que casi obligo a esta a tener sexo en ese momento. Esta hábilmente me calmo prometiéndome que el día domingo iría a la finca con su hija para algo más que presentarles a mis niños.

    El día domingo; Yoli y su hija llegaron a la finca. Después de saludarnos conduje a ambas a la mazmorra. Allí se encontraban Belén, Laura y Mateo desnudos y cada uno en una postura o aparato distinto.

    Belén se encontraba sentada en una bicicleta fija; la cual había sido modificada para que al accionar los pedales dos barras metálicas subieran y bajan sincronizadamente introduciendo en su ano y en su vagina unos consoladores que poseían en su extremo.

    Laura; al igual que Belén poseía en su cuerpo un arnés corporal de sogas que se llama “KARADA” en la práctica del vendaje. Además; en sus pezones tenía colocado unas pequeñas pinzas metálicas que estaban unidas entre sí por una fina cadena plateada. En el medio de esta cadena había otra sección de la misma que sujeta a otra pinza metálica que aprisionaba su clítoris. Además se encontraba en posición de “STRAPPADO” (bondage) y tanto en su ano como en su vagina tenía insertado unos vibradores.

    Mateo se encontraba contra una pared atado sus brazos y piernas por separado y abiertos, dejándolo totalmente expuesto y vulnerable en forma de X. esta posición se denomina “SPREAD-EAGLE” .En su miembro viril tenía colocado una bomba de vacío; que junto a los sacaleches que poseía en sus pechos hormonados lo succionaban con fuerza.

    Madre e hija quedaron sorprendidas; en esta primera visita a mi mazmorra, por como trataba a los niños. La visita de Yoli y su hija Lorena se debía a varios motivos, estos era:

      -Yoli me había pedido ver como hacía para cambiar la personalidad de los niños y que además deseaba aprender sobre mis técnicas.

      -Lorena después de tener su primera relación sexual lésbica incestuosa con su madre unos días antes había decidido seguir los pasos de su madre e iniciarse en la prostitución con la ayuda y aprobación tanto mía como de la madre.

      -Aunque Yoli ya había tenido relaciones sexuales conmigo y conocía las dimensiones de mi herramienta considero que yo era la persona indicada para desvirgar a su hija Lorena y así iniciarla no solo en el sexo; sino en todo lo relacionado a ello.

      -Lorena cuando supo por su madre de mi descomunal tamaño viril deseo y le pidió a su progenitora que yo fuese su primer hombre; ya que la niña, por lo poco que me conocía ya me consideraba como su amigo y confidente.

      -Yoli deseaba poder estar una vez más con el pequeño Mateo para sodomizarlo a su gusto.

    Estas habían sido las excusas que la meretriz madre me había dado unos días antes para evitar que la poseyera con locura cuando me relato su encuentro sexual con su hija de 13 años.

      -Bienvenidas a mis mazmorras – dije yo – aquí todo es posible

      -Guau… huele mejor que en el CATY después de una orgia – exclamo la meretriz –

      -Guau… huele a mucho sexo – acoto la niña –

      -Gracias – respondí –

      -Ustedes están aquí para aprender y obedecer – dije seriamente –el único que puede estar aquí vestido soy yo, así que

      -Bien… - dije – aprenden rápido – observando como madre e hija se desnudaba rápidamente -

      -Aquí no importa si las lastimo o no – dije con tono enérgico – aquí el dolor es placer

      -Okey Pablo – respondieron a ambas a la ves –

      -Aquí adentro me llamaran AMO – grite – entendido

      -Si AMO – respondieron ambas

      -Antes de empezar con ustedes – dije – me ayudaran a guardar a las otras.

    Me dirijo a donde se encontraba Belén que tenía todo su cuerpo transpirado y lucia extremadamente agotada. Detuve la máquina y le ordene a Lorena que liberara sus manos que estaban dentro de unos guantes de boxeo y estos estaban sujeto al manubrio.

    Yoli y yo quitamos las piernas de Belén que se encontraban dentro de unas botas de sky y que a su vez estaban unidas a los pedales del aparato. Al ser liberada, el cuerpo de la quinceañera cayo inconsciente sobre la meretriz que si no la hubiera sujetado habría caído al piso. Le indique que la llevara al calabozo; cosa que hizo inmediatamente.

    Lorena y yo procedimos a desatar a la pequeña Laura para después de retirarle los vibradores que tenía insertados en sus agujeros sexuales llevarla al otro calabozo y encerrarla.

    Desate a Mateo y le quite los sacaleches de sus pechos hormonados para después recostarlo en una camilla y ordenarle que se quedara allí.

    Realice un correaje “SHINJU”en la meretriz para después realizarle un arnés “KARADA”y al finalizar ordenarle que se centrara en una especie de pequeño potro de gimnasia que estaba amurado a la pared. Con la ayuda de su hija Lorena sujete sus brazos y piernas a la pared. A través de un acceso especial que tenía el potro donde estaba sentada Yoli introduje dos pequeños vibradores que a su vez ingresaron en su cavidad anal y vaginal.

    Antes de colocarle un “ballgag” en la boca de la meretriz; le pregunte hasta donde deseaba que llegara con su hija.

      -Hasta donde ella quiera y más. – respondió -

    Después de esto lleve a la pequeña de 13 años hasta la camilla ginecológica y después de ubicarla en posición le realice un breve examen para constatar su virginidad mediante el uso de un especulo médico.

    La felicite por mantener aun intacto su himen mientras la ayude a bajarse de la  camilla para después colocarle un antifaz ciego en los ojos tapando su vista.

    Me quite la única prenda que tenía puesta y que era un mono de vuelo. Accione los vibradores de Yoli y tome de la mano a Lorena para guiarla hasta la inmensa cama que estaba frente a la meretriz.

    Le di un tierno beso en la boca a la niña para después hacerla arrodillarse ante mí. Le ordene que abriera la boca para así introducir mi flácido miembro.

    Enseguida la niña comenzó a mamarlo como toda una experta; así que la detuve y le pregunte:

      -Tu madre te enseño a hacerlo? - dije yo –

      -No amo; aprendí sola – respondió

      -Como es eso – interrogue –

      -Es que hay un chico en la escuela que gusta de mi… - respondió ella -

      -Ósea que tienes un noviecito – dije yo algo enojado interrumpiéndola –

      -No amo. No es mi novio. – dijo ella –

      -Entonces – dije – explícate

      -Él es más grande y dice a todos que gusta de mi pero no es verdad – dijo –

      -Se la chupo por que el me chantajea con delatarme en la escuela – dijo Lorena –

      -Cuantos años tiene y por qué te chantajea – pregunte –

      -Tiene 15 años y él sabe que soy yo la que lanza bombas fétidas en la escuela y hago otras travesuras, como escaparme. – respondió -

      -Y desde hace cuánto le mamamas la verga – pregunte –

      -Desde principio de año, amo – dijo Lorena –

      – dije yo enérgicamente – después recibirás un castigo por no haber dicho esto antes.

    Introduje mi verga que ya comenzaba a erguirse en la boca de Lorena; para que esta reanudara su labor. La niña no podía engullirse toda mi verga, solo se tragaba la mitad de esta: pero al fin y al logro su objetivo.

    Realice mi descarga de semen en la boca de la niña de 13 años y está al recibirla no se ahogó como lo haría cualquier niña novata. Como toda una experta se tragó mis líquidos sin dejar rastros de ellos.

    Con mi verga aun rígida; hice que la niña se colocara en posición de perrito y así comencé a lamer su ano lenta y suavemente. Mis lamidas pronto la hicieron gemir.

    Ensalive uno de mis dedos y lentamente se lo fui introduciendo en su ano. Lorena se quejó de esta intromisión pero aun así seguía gimiendo. Hice que mi dedo entrara y saliera de ese pequeño y virgen agujero trasero por unos cuantos minutos y cuando la niña estaba por tener su primer orgasmo le introduje un segundo dedo. Esto la hizo crispar y arqueo su espalda levantando su cabeza.

    Jocosamente le dije que solo eran dos de mis dedos y que se imaginara mi verga. Juguetee por unos minutos más para después introducir un tercer y último dedo para así dilatarle el ano.

    Deje caer abundante lubricante en el trasero de Lorena y dentro de ella. Cuando la niña estaba a punto de tener su segundo orgasmo; me coloque detrás de ella y dirigí mi verga hacia su dilatado ano.

    Con un pequeño pero leve empujón; mi glande y un par de centímetros de mi verga se introdujeron en sus intestinos. Esto le hizo dar un fuerte grito de negación; a la vez que elevo su cabeza y la giro hacia mí como intentando mirarme, cosa que no podía hacer por su antifaz.

    Recién; cuando toda mi verga se perdió de vista dentro de la niña de 13 años, le quite el antifaz y tomándola de los pelos hice que primero se observara en el gran espejo de la pared, para después mirara el cuerpo de su madre que temblaba gracias a los vibradores que había dentro de ella.

      -Realmente quieres ser prostituta como tu madre – grite meneándole la cabeza –

      -Si amo. – respondió sollozando – quiero ser prostituta como mi madre.

      -Porque?? – pregunte yo mientras retiraba un poco mi verga y dando una fuerte estocada la volví introducir –

      – se quejó Lorena - Porque algún día, mi padre y mi tío querrán estar conmigo… - y dijo -

      -Y cuando me estén cogiendo les diré quien soy; así le da un infarto y se mueren esos hijos de puta.

      -Escuchaste Yoli – dije yo –

      -Eso lo vamos a arreglar después – le susurre al oído -

      -Aaahhhiiii – pronuncio la niña –

    Poco a poco; los quejidos de la niña de 13 años se fueron convirtiendo en gemidos. Cambiamos varias veces de posición y cuando su cuarto orgasmo llego también descargue una nueva cantidad de semen; inundando sus tripas.

    Deje que Lorena descansara unos minutos; para así desatar a su madre que parecía estar a punto de desmayarse.

    Yoli me comento que jamás en su vida había tenido tantos orgasmos como los que había tenido minutos antes.  La meretriz me dijo también; mientras observaba al pequeño Mateo recostado en la camilla que no deseaba sodomizarlo ese día, pero si tener sexo con él y con algo de privacidad. No tuve objeción a su pedido y le dije que usara una de las habitaciones de huéspedes. Yoli despertó dándole unos tiernos besos  al pequeño transexual hormonado de 6 años y lo condujo tomado de la mano a otra habitación.

    Volví a la cama, donde Lorena permanecía en posición fetal y comencé a besar sus hombros para después dirigirme hacia su rostro y besarla apasionadamente.

    Mutuamente y con suavidad; comenzamos a acariciarnos. Cuando una de sus manos llego a mi flácida verga; la niña no pudo evitar bajar su mirada y exclamar asombrada por las dimensiones de esta.

    Las caricias continuaron; en especial la de mis dedos sobre el clítoris de Lorena. Formamos un 69; para así de esta forma, yo lamerle la vagina y ella succionar mi verga. E esta postura; Lorena tuvo un nuevo orgasmos después de unos minutos.

    Hice que la niña de 13 años se sentara sobre mi verga y que ella misma se fuera introduciendo mi descomunal verga en su virginal conchita. Sentí como esta hizo tope en su himen y una mueca de dolor se dibujó en el rostro; que después de esto dejo caer todo el peso de su cuerpo para así ensartarse ella misma.

    Permaneció inmóvil por unos segundos; mientras yo comencé a acariciar su clítoris. Suavemente inicio los movimientos pélvicos y sus gemidos no se hicieron esperar. Con el pasar de los minutos la cabalgata que realizaba la niña se hizo cada vez más frenética hasta que casi al unísono llegamos a un orgasmo increíble fusionados en un beso apasionado.

    A partir de ese día; la meretriz y su pequeña hija de 13 años se convirtieron en mis aprendices en el arte del “SHIBARI” o bondage, como así también en el BDSM. Para nuestras prácticas utilizábamos a Belén, Laura y Mateo; aunque mi interés en ellos ya estaba decayendo.

    No hizo falta que adoctrinara demasiado a la pequeña Lorena para que esta tuviera un cambio radical en su conducta general sino también en la escuela. La niña no solo debía repasar conmigo lo aprendido en la escuela; sino que también tomaba las clases extras que le daba con mucha dedicación y lo sabía muy bien que ante cualquier falta seria castigada física y sexualmente.


    Continuará

    zoey y maxy, clip l0l1 en blogSDPA.com

    Clio L0L1: "Zoey y Maxy" (de GeorgeX) [Gratis]

    23 de febrero de 2025 en Videos L0L1 & Sh0t4

    Para ver este contenido gratuito debes ser usuario registrado y con sesión iniciada.

    tarde caliente con mi dulce hija, clip l0l1 en blogSDPA.com

    Clip L0L1: "Tarde caliente con mi dulce hija" [15 puntos]

    23 de febrero de 2025 en Videos L0L1 & Sh0t4

    Esta publicación es la parte 28 de un total de 32 publicadas de la serie Videos L0L1 & Sh0T4


    Jugando en la cama con papi, clip l0l1 en blogSDPA.com

    Clip L0L1: "Jugando en la cama con papi" (de DeanW) [Gratis]

    23 de febrero de 2025 en Videos L0L1 & Sh0t4

    Para ver este contenido gratuito debes ser usuario registrado y con sesión iniciada.

    imagenes L0l1 y sh0t4 de EGS parte 04

    77 Imágenes L0L1 y SH0T4 (de EGS), Parte 04 [50 puntos]

    23 de febrero de 2025 en Imágenes L0L1 & Sh0t4

    Esta publicación es la parte 35 de un total de 40 publicadas de la serie Imágenes L0l1 & Sh0t4


    32 imagenes l0l1 de varios autores

    32 Imágenes L0L1 de varios autores [10 puntos]

    23 de febrero de 2025 en Imágenes L0L1 & Sh0t4

    Esta publicación es la parte 34 de un total de 40 publicadas de la serie Imágenes L0l1 & Sh0t4


    El lago rosa, Parte 04

    Cómic SH0T4: "El Lago Rosa", Parte 04 (de Del Rio121) [Gratis]

    23 de febrero de 2025 en Imágenes L0L1 & Sh0t4

    Para ver este contenido gratuito debes ser usuario registrado y con sesión iniciada.

    La fiesta de cumpleaños de Michelle, relato SDPA en blogSDPA.com

    La fiesta de cumpleaños de Michelle, Parte 01 (de InfamousI)

    22 de febrero de 2025 en Incesto, BDSM, Sexo en grupo, Relatos SDPA, Jovencitas

    Esta publicación es la parte 1 de un total de 2 publicadas de la serie La fiesta de cumpleaños de Michelle

    Apenas podía creer lo que veía. Lo que había sido un fin de semana agradable y una fiesta de cumpleaños normal y corriente para una niña de siete años de clase alta se había transformado por completo en algo que nunca había soñado ni en mis fantasías más salvajes. Como era domingo y, por lo tanto, noche de colegio, todas las demás familias se llevaron a casa a las amigas de mi hija; la última se fue aproximadamente media hora antes de que todo mi mundo se volviera un torbellino. Después de que la última se fue, mi esposa, Rachel, una deslumbrante belleza pelirroja y de ojos verdes que conocí en la universidad y de la que me enamoré casi de inmediato y que todavía estaba en la flor de la vida a sus veintiséis años, cerró la puerta detrás de ellas y se unió a las demás en la ventana. Me di cuenta de que algo estaba pasando por el entusiasmo con el que todas las vieron subirse al auto y alejarse.

    Como Rachel y yo éramos hijos únicos, yo había perdido a mis padres en un accidente de avión dos años antes, y ella había perdido a su madre en un accidente durante una cirugía de rutina hace trece años, solo quedaban mi suegro, Lawrence, que cumpliría cincuenta años más tarde en el año, y su nueva esposa, Suzie, una belleza casi igualmente deslumbrante de solo diecinueve años, con cabello rubio arena recogido en coletas y grandes ojos azules, que la hacían parecer incluso más joven de lo que era, presentes conmigo, mi esposa y mi hija, Michelle, que había tomado su apariencia de su madre, teniendo el mismo cabello rojo, ojos verdes y tez ligeramente pecosa que aseguraban que ella también florecería en una belleza deslumbrante.

    Una vez que estuvieron seguros de que se habían ido, mi esposa se volvió hacia mí, con una sonrisa radiante en su hermoso rostro, sus ojos verdes brillantes y su cabello largo colgando detrás de ella por la velocidad de su giro, "Está bien, cariño, tenemos un regalo más para Michelle y para ustedes dos, y sabemos que les encantará, pero es una sorpresa y necesitaremos tiempo para prepararnos, así que hasta entonces, tendrás que usar esto e ir a la habitación a esperar hasta que Suzie te recoja".

    Suzie se acercó con una venda en la mano y la ató alrededor de mi cabeza antes de guiarme a la habitación. El cuerpo joven y voluptuoso de Suzie y su rostro tentadoramente inocente siempre me volvían loco y siempre bebía profundamente de su figura hipnótica cuando tenía la oportunidad y me follaba a mi esposa como un alma en pena esa misma noche. Esto se hizo con el pleno conocimiento de Rachel y Suzie, y Rachel incluso disfrutaba viéndome follar con otras chicas, desde que invitó a su compañera de dormitorio de la universidad a nuestra segunda cita, pero Suzie siempre dijo que no creía que Lawrence lo aprobara y que tendría que pedirle permiso primero si quería follarla, algo que nunca tuve el coraje de hacer.

    La mayoría asume que ella está con él solo por el acuerdo multimillonario por negligencia médica y la póliza de seguro de vida que obtuvo por la muerte de su esposa, como yo lo hice cuando me enteré de sus intenciones de casarse justo después de que ella cumpliera dieciocho años, pero la verdad (al menos hasta donde me dijeron) era que ella era la hija de la familia propietaria de la granja vecina a la suya y él y Rachel la conocían desde que nació. En el momento de la muerte de su esposa y la demanda por negligencia médica, su familia estaba bastante apurada y Lawrence les dio generosamente el dinero que necesitaban para salvar su granja. Desde entonces, había sido bastante cercano a la familia y a Suzie siempre le gustó cuando crecía. Sabiendo lo solo que estaba, especialmente después de que Rachel se fue a la universidad, comenzó a pasar más tiempo con él y su relación simplemente creció a partir de ahí hasta el punto de que ella estaba dispuesta a darle la oportunidad de pasar el resto de su vida con él como su esposa. Era una historia lo suficientemente dulce como para que no quisiera arriesgarme a estropearla follándomela, incluso si pensaba que podría obtener su bendición.

    De todos modos, que me llevara a mi dormitorio con los ojos vendados fue algo que me pareció muy excitante, y mi polla rápidamente se hinchó de sangre, tirando dolorosamente contra mis pantalones cuando llegamos al dormitorio, donde me dio la vuelta y me sentó.

    —Puede que pase un rato, así que quizá quieras quitarte los zapatos y relajarte —susurró y se agachó para quitarme los zapatos mientras imágenes de ella desnudándome, atándome a la cama y haciendo lo que quisiera conmigo danzaban en mi mente—. Y no te masturbes el día del cumpleaños de tu hija, viejo pervertido espeluznante —añadió en tono burlón después de notar la erección que presionaba contra mis pantalones antes de dejarme en una silenciosa oscuridad.

    Me hicieron esperar unos buenos veinte minutos sólo para aumentar mi expectación, mientras mi mente corría para imaginar lo que podrían haber conseguido que Michelle y yo pudiéramos disfrutar juntos. En realidad, no había forma de saberlo. Mi suegro, que cumpliría cincuenta años en cuestión de meses, perdió a su esposa y a la madre de Rachel hace trece años cuando una cirugía de rutina salió mal y había ganado millones, tanto de su póliza de seguro de vida como de la demanda por mala praxis contra el hospital y había ahorrado la mayor parte, prefiriendo seguir viviendo una vida bastante sencilla en la granja de su familia, pero disfrutaba mucho mimando a su hija y a su nieta aquí y allá, llevándolas a vacaciones lujosas, y a mí también cuando podía encontrar tiempo libre de mi trabajo como corredor de bolsa exitoso, construyéndonos una piscina cubierta y un jacuzzi en nuestro patio trasero para que pudiéramos disfrutarlo todo el año (lo que convirtió a Michelle en una niña muy popular tanto en la escuela como en el vecindario, incluso más de lo que ya lo era la pequeña belleza pelirroja con la personalidad alegre), entre varios otros regalos. No es que yo no ganara bien la vida y pudiera permitirme por mi cuenta una muy linda casa de tres pisos con un césped lo suficientemente grande como para acomodar la piscina y aún tener suficiente espacio para un patio de juegos, un patio y césped para correr y jugar, pero mi salario de seis cifras no podía compararse con las ocho cifras que él tenía repartidas en cuentas bancarias e inversiones.

    Él ya le había regalado un pony joven y un instructor de equitación personal el día anterior para que pudiera aprender a cuidarlo y montarlo cada vez que estuviera en la granja el día anterior, así que había pensado que la entrega de regalos había terminado, pero al pensar en eso en esos largos veinte minutos de espera, mi mejor suposición fue una casa rodante para llevar a la familia a acampar, que la escondieron en algún lugar y tuvieron que ir en auto para buscarla. No podría haber estado más equivocado. Finalmente, me sobresalté y desperté de mis cavilaciones medio dormidas cuando un tirón en mi mano, Suzie me avisó silenciosamente que me levantara, luego se puso detrás de mí y puso sus manos sobre mis hombros, guiándome hacia dónde ir hasta que llegamos a las escaleras, donde tomó mi mano y la colocó en la barandilla antes de guiarme hacia abajo.

    En lugar de llevarme afuera, a una casa rodante que la esperaba, me llevó al comedor, me detuvo justo cuando entramos en la habitación y me susurró al oído: —Está bien, ya puedes quitártela—. Cuando me quité la venda de los ojos, no estaba preparado para lo que mis ojos se acostumbraron a ver después de pasar tanto tiempo en la oscuridad. Allí, tirada en la mesa, estaba mi hija de siete años, desnuda sobre mi esposa, también desnuda, abriendo bien sus pequeñas nalgas para revelar su coño y su culo relucientes justo encima de la cara de su madre, con mi suegro, también sin ropa, en el otro extremo de la mesa, sosteniendo una cámara de video para captar mi reacción mientras me quitaba la venda de los ojos, mientras Suzie rápidamente me desabrochaba los pantalones por detrás y los dejaba caer, junto con mis boxers, al suelo y comenzaba a acariciarme la polla mientras todos gritaban "¡SORPRESA!".

    Sorpresa no fue la palabra adecuada para describir mi reacción; conmocionado y horrorizado tal vez ni siquiera le hiciera justicia mientras miraba boquiabierto la escena incestuosa que tenía ante mí.

    —Mi papá comenzó una pequeña tradición donde tomó mi virginidad en mi séptimo cumpleaños, y como parte del trato para salvar su granja, hizo que el padre de Suzie la cogiera en su séptimo cumpleaños sobre la cara de su madre seguido inmediatamente después por él, así que ahora que Michelle tiene siete años, es hora de que le saques la cereza para que papá pueda cogérsela después—, explicó Rachel como si fuera la cosa más normal e inocente del mundo.

    Ni siquiera sabía cómo responder a eso, mis pensamientos me fallaban mientras trataba de comprender qué estaba pasando.

    —¿Por qué no le das a probar su melocotón virgen antes de estropear su fruta verde? ¡Todos lo hemos hecho, y está delicioso!—, exclamó mi suegro, acariciando su impresionante polla dura como una roca, grabando la escena mientras mi esposa hundía su cara en el coño de mi hija, lamiendo y mordisqueando para deleite de mi pequeña.

    —Sí, papi, he estado esperando años para que entierres tu gran polla dura en mi pequeño y apretado coño. Mami y Suzie me dan mucha envidia cuando el abuelo las folla frente a mí. Todo lo que me han hecho es comerme y meterme los dedos en el culo, y me han obligado a comerlas y chupar la polla y el culo del abuelo—, suplicó Michelle antes de chillar y gemir cuando su madre deslizó suavemente un dedo por su trasero para demostrarlo.

    —Oh, sí, mami, haz que me corra para papi. Quiero que me vea correrme, que sepa cuánto deseo su polla dura. —Y se corrió, dejando escapar un fuerte y largo gemido de placer—. Oh, sí, joder, mami, así de fácil.

    Apenas me di cuenta de que mis brazos se alzaban por sí solos mientras Suzie también me quitaba la camiseta, presionando sus pechos firmes y alegres contra mi espalda, haciéndome darme cuenta de que ella también estaba desnuda, antes de volver a acariciar mi polla, que ahora rezumaba generosamente líquido preseminal. Me susurró al oído: —Vamos, fóllate a tu niña y córrete profundamente dentro de ella para que tu esposa pueda comer el sangriento y pegajoso desastre que haces, y si tienes suficiente energía, finalmente te dejaré follarme mientras vemos a tu niña siendo follada por su viejo y sucio abuelo.

    —Oh Dios—, me habría corrido en ese momento si ella no hubiera dejado de bombear y comenzado a empujarme hacia la ofrenda virgen abierta de mi hija. Solo tuvo que moverme un par de pasos antes de que mi instinto animal tomara el control y caminé el resto del camino por mi propia cuenta, agachándome para examinar en detalle el agujero no follado de mi pequeña, bajando la cabeza de mi esposa para empujar mi polla hasta su garganta y levantando a Michelle sobre sus pies e inclinándose, apoyándose en las impresionantes tetas de copa D de su madre, para que pudiera follarle la cara a mi esposa mientras seguía viendo bien su joven coño. Estaba reluciente de saliva, sudor y jugos vaginales prematuros.

    —¿Es esto lo que realmente quieres, perra sucia? ¿Que me folle a tu propia hija sobre tu sucia boquita? Joder, sabía que te encantaban los coños, pero no sabía que también te encantaban los gatitos —le grité mientras mi vara entraba y salía sin esfuerzo. Como era una experimentada chupadora de pollas, pudo asentir con la cabeza y envió una ola de placer a través de la punta de mi polla, y cuando Lawrence se giró alrededor de la mesa para obtener un mejor ángulo de cámara, olí profundamente el coño y el culo de mi niña y me adentré, dándole a su pequeño clítoris una buena paliza con la lengua, descubriendo que su pequeño cuerpo tenso ya estaba bien engrasado para mí, comencé a follarle el culo con los dedos yo mismo, viendo cómo mi dedo medio entraba y salía sin esfuerzo de él.

    —Y a ti, jovencita, ¿qué coño te pasa? ¿Prostituirte con tu propia madre y tu abuelo y no decírmelo nunca? Creo que una putita traviesa como tú necesita sus azotes de cumpleaños. —La azoté con fuerza, una y otra vez, siete veces en total mientras contaba lenta y deliberadamente cada una, cada una más fuerte que la anterior, sin dejar de golpear rítmicamente con los dedos su pequeño y apretado ano.

    —¡Uno!

    Ella gritó y gritó: —Lo siento, papá, me obligaron a no decírtelo. Quería hacerlo, ¡pero me hicieron prometerlo!

    —¡Dos!

    Ella chilló y gritó de nuevo: —¡No, papi! Dijeron que tenía que recibir una buena formación para ti, que tenía que ser una buena zorra chupadora de pollas y devoradora de coños cuando tuviera siete años para que pudieras violarme como es debido.

    —¡Tres!

    —¡Aghh! —Las lágrimas corrían por sus mejillas—. ¡Por favor, papi, no más, creo que no puedo soportarlo más!

    —¡Cuatro! ¿Cuánto tiempo llevas chupando la polla del abuelo, pequeña zorra? ¿Cuánto tiempo? —Ahora estaba llorando de verdad, su culito estaba rojo y seguro de que se le iba a salir un moretón, pero no me importaba, estaba tan llena de ira y lujuria que tenía que desahogarme—. ¡Contéstame, pequeña zorra! ¡Cinco!

    —Meh-meh-yo y mamá-mm-mi ha-hemos estado comiéndonos los coños desde... desde que tenía tres años. He estado comiendo su semen desde que tenía cuatro años. Él ha estado metiendo su polla en mi boca desde que tenía cinco años... —escupió finalmente entre sollozos.

    —¿Cuatro años? ¿Cuatro años has sido la pequeña muñeca sexual de mamá y nunca me lo dijiste? ¡Seis!— Saqué mi pene de la boca de mi esposa y le di una buena bofetada en su hermoso rostro también, luego empujé mi pene de nueve pulgadas hacia adentro, empujando hasta el fondo de su garganta hasta que mis bolas sofocaron su rostro y su barbilla tocó mi piel asegurándome de que se atragantara con él, —¡Zorras traidoras! ¡Siete!

    La última nalgada combinada con la vigorosa penetración anal hizo que mi pequeña niña se volviera loca y gritara fuerte y prolongadamente, tanto de éxtasis como de agonía, mientras su esfínter se tensaba alrededor de mi dedo y su cuerpo se convulsionaba en un violento orgasmo. Sus rodillas se doblaron y se desplomó sobre la cara de su madre.

    —Bueno, aquí está tu regalo que tanto querías, nena, espero que te haga feliz —le grité y saqué mi palpitante herramienta de la boca de mi esposa y, con un movimiento rápido, la alineé con la entrada vaginal ncreíblemente apretada y sin desarrollar de mi preciosa niña y lo metí hasta que sentí el desgarro de su himen, una hazaña fácil por lo húmedo que estaba su coño y resbaladizo de saliva que estaba mi pene. Ella gimió de nuevo, todavía sin haberse recuperado de mis brutales azotes, mientras escuchaba a los tres testigos de mi exhibición primaria correrse al unísono, mi suegro, que estaba obteniendo una imagen personal y de cerca de la penetración, rociando su semen por todo el costado de la cara de su hija mientras ella lamía salvajemente donde mi pene se unía al coño de nuestra bebé, lamiendo la sangre que comenzaba a supurar.

    —Mierda, Richard, eso fue lo más caliente que he visto en mi vida—, dijo Suzie detrás de mí.

    —Joder, sí, me alegro de poder grabar todo esto en cámara. Esto es algo para recordar.

    Ahora medio enterrado en el coño de mi hija, sus palabras empezaron a hacerme entrar en razón y mi furia desenfrenada por lo que mi esposa y su padre le habían estado haciendo a nuestra hija se calmó mientras el pequeño cuerpo destrozado por el dolor de Michelle jadeaba y temblaba alrededor de mi miembro tratando de recuperarse de mi salvaje castigo. Acaricié amorosamente su pequeña mejilla mientras ella yacía aturdida sobre el cuerpo desnudo de su madre, apoyando su cabeza sobre su suave y tenso estómago. —Está bien, nena—, dije en un susurro ronco, todavía tratando de recuperarme y encontrar mi voz, —lo peor ya pasó, tómate todo el tiempo que necesites y avísame cuando estés lista para que vaya más allá.

    Ella solo asintió mientras yacía allí recuperando el aliento. Lenta y ligeramente, retiré mi polla una pulgada y empujé hacia atrás, ella gruñó, pero no pareció dolerle demasiado, así que lo hice de nuevo, tirando un poco hacia atrás y luego empujando hacia adelante, yendo suave y lento, pero construyendo un ritmo constante para acostumbrar los cuatro o más centímetros de su coño en los que introduje mi polla a la sensación, y pronto, sus gruñidos y gemidos perdieron su tono de dolor y adquirieron uno más placentero. —Ooo, eso comienza a sentirse bien, papi—, susurró.


    Continuará

    Chantajeando a Mary, relato SDPA en blogSDPA.com

    Chantajeando a Mary, Parte 01 (de Johernan)

    22 de febrero de 2025 en Relatos SDPA, Sexo en público

    Esta publicación es la parte 1 de un total de 5 publicadas de la serie Chantajeando a Mary

    Mary no podía creer como pudo llegar a esa situación, era apenas la segunda vez que había visto a ese hombre en el gimnasio donde su hijo practicaba y había terminado en eso. Lo único que quizás la tranquilizaba era que su hijo no la había visto, ella estaba casi segura de ello, sin embargo el pensamiento la inquietaba.

    El viaje de regreso a la casa desde el gimnasio fue callado, ella miraba de reojo a su hijo Juan para ver si notaba algo que revelara lo contrario a lo que ella pensaba, pero su Juan iba entretenido mirando afuera por la ventana del vehículo. Ella se sintió tranquilizada y suspiro profundo.

    De nuevo vino a su mente la escena que ella protagonizó en el baño de varones. `que fue lo que me paso, porque flaquee tan rápido' pensaba. Ella siempre se sentía atraída por hombres fuertes y varoniles y de su edad. Aquel hombre no solo que encajaba perfectamente en esos requisitos. Además tenía un verbo que convencería a cualquier hembra así fuera una jovencita a pesar que él ya estaba tarde en sus cuarenta. Mary tarto de olvidar su recién vivida experiencia, y se concentro en manejar.

    Después que había terminado de acomodar sus cosas en la casa se dispuso a ver su correo en la computadora, mientras revisaba cada correo le llego un mensaje nuevo de un remitente desconocido. Ella pensó en eliminarlo inmediatamente pero el titulo le llamo la atención. El titulo rezaba "Gimnasio de la escuela" ella entonces lo abrió.

    Cuando empezó a leer el mensaje quedo toda desencajada, la cara se le puso completamente pálida y era un manojo de nervios, el mensaje leía:

    "Una imagen dice más que mil palabras"

    Después habían un set de fotografías todas de buena resolución que mostraban todo lo ocurrido en el baño de varones del gimnasio. Mary no sabía qué hacer, entonces otro mensaje del mismo remitente la trajo de nuevo a la realidad. Ella lo abrió ansiosa pero llena de temor. Este mensaje le decía que ella debía agregarlo ya, porque necesitaba chatear con ella. Ella estaba tan nerviosa que lo único que atino hacer fue agregar a este desconocido a sus contactos, y abrir el chat.

    El desconocido inmediatamente dijo: "Muy bonitas fotos pero me pregunto cómo se verían en las manos de tu esposo"

    Una espina parecía que atravesaba el corazón de Mary. Su esposo era muy celoso y vengativo, si viera esas fotos se divorciaría de ella inmediatamente y la echaría a la calle sin nada, incluso sus hijos los perdería, ella estaba segura de eso. Entonces un sentimiento de rabia la embargo por todo su cuerpo, ella dijo para sí misma. `Él tiene toda la culpa.' Era verdad que el gusto por mostrar sus encantos a los hombres había nacido desde que su cuerpo empezó a desarrollarse y fue formándose en un voluptuoso cuerpo, sus tetas eran la envidia de sus compañeras en el colegio, siempre tenían que comentar de ellas.

    Su trasero era redondo, con nalgas firmes, que hacia babear hasta los profesores. Ya en segundo de secundaria le gustaba quitarse sus pantis y se acercaba a la baranda del primer piso a la hora del recreo y sabia que los muchachos la veían, pero ella hacía como que no se daba cuenta. Luego cuando se caso, su esposo la empujo a otro nivel. Para su desgracia o fortuna se caso con un hombre que compartía su gusto por el exhibicionismo, y empezó a obligarla que usara ropa sexy que no dejaba mucho a la imaginación y la llevaba a lugares públicos. Vestidos suaves y ajustados que hacían resaltar su trasero, con escotes que hacían todo un reto mantener sus tetas dentro del vestido. Siempre vestidos que iban a medio muslo, o a escasos centímetros por debajo de los globos de sus nalgas, la mayoría de las veces no le permitía usar pantaletas. Entonces cuando iban por una calle o un centro comercial el empezaba a tomarle fotos, haciéndola posar con poses sexys que a veces rayaban en lo inmoral en medio de la gente. La gente se quedaba mirándola y ella al principio sentía vergüenza, pero poco a poco su gusto por hacer cosas pervertidas donde hubiera mucha gente empezó a florear en su interior. Ahora nunca usaba ropa interior y siempre iba vestida con algo sexy y a veces hasta vulgar. Su mayor placer era recibir piropos de los transeúntes, a veces obscenos, pero lejos de avergonzarla, ella sentía placer. Ella tiene dos hijos uno de diez y es el varón y una hija de dieciocho que lleva su figura cuando ella era de su edad, cuando andan juntas en el centro comercial ella no está segura a cuál de las dos miran más.

    De nuevo el sentimiento de culpa empezó a embargarla, `porque ella había sido tan débil.' Se repetía para sí misma. El primer día que vio aquel hombre en el gimnasio inmediato supo sus intensiones, él incluso fue vulgar con ella, manoseándole las nalgas mientras ella estaba de pie entre los padres de los compañeritos de su hijo y lo veía jugando junto con sus compañeros, el hombre se había apoyado en su espalda entre la multitud, empezó a manosearla allí, ella al principio trato de apartarse del grupo, pero aquellas manos fuertes empezaron hacer círculos entre sus nalgas, yendo casi hasta su coño pelado, inmediatamente empezó a sentirse excitada, y ella quedo allí como paralizada mientras aquel hombre la había convertido en un juguete sexual. Al rato ella sintió el guevo del tipo que hacia recorridos por su culo, mientras la mojaba con su líquido preseminal. Ella ya no tenía fuerzas para luchar, en cambio abrió sus piernas para darle mayor acceso aquel miembro. De repente el tipo se alejó dejándola a ella con un sentimiento de frustración y alivio.

    Sin embargo hoy ella había ido todo el camino. Al igual que aquel día mientras ella estaba entusiasmada con la manera como los niños entrenaban, al igual que las otras madres haciendo hurras a sus muchachos, el tipo se presentó y esta vez la tomo por el brazo, invitándola con su mirada a que lo siguiera. Como si estuviera hipnotizada por la mirada de aquel hombre ella sencillamente lo siguió hasta el baño de los varones.

    Los baños tanto de hembras como de varones estaban construidos en dos anexos apartados e independientes al lado del domo del gimnasio. El baño de los varones era una construcción sencilla. Al atravesar la puerta principal del anexo lo primero que había era una sala grande con bancos hechos de cemento y una hilera de armarios rodeando una pared grande, esta área era iluminada por unos ventanales grandes que estaban justo al lado de la puerta principal. El resto del interior había sido construido para acomodar el área de lavamanos, poceta y urinarios y las duchas que ocupaban otro espacio abierto separado de la vista de los que pasaran por el lugar.

    Cuando Mary atravesó la puerta principal del baño el hombre la tomo por el brazo y la empujo contra uno de los bancos de cemento, Mary solo alcanzó a apoyarse con el banco con sus dos manos cuando el tipo le levanto el vestido y empezó a manosear sus nalgas justo como había hecho antes, Mary pudo haber salido corriendo pero no lo hizo, en cambio empezó a sentirse toda excitada y abrió sus piernas tan ancho como pudo para darle mayor acceso aquellas manos que exploraban su raja del culo y viajaban hasta su coño ya húmedo, haciendo una parada por su culo. El tipo se agacho detrás de ella y empezó hacer con su boca lo que minutos antes estaba haciendo con las manos, Mary empezó a gemir de placer con gemidos que eran audibles si alguien se acercaba a la puerta del baño. Cuando ella estaba teniendo sexo con su esposo, los gemidos y gritos se podrían escuchar por toda la casa, además que perdía toda noción de la ubicación y su mente se le nublaba, y empezaba a decir vulgaridades de sí misma que después no recordaba si alguien no le decía. Una hora después que ella entro al baño, el tipo la seguía cogiendo con su miembro de unos 30 centímetros y unos cinco de diámetro. Ella empezó a sentir un orgasmo como nunca en su vida había alcanzado uno y los gemidos de placer eran audibles por toda la construcción, el hombre termino vaciando su semen en el culo de Mary y después la arrodillo para que limpiara su miembro con la boca, Mary se entrego desenfrenadamente aquél miembro como si ése era el ultimo que iba a mamar en su vida. Una de sus debilidades era mamar un guevo, desde niña ella había aprendido a mamar guevos gracias a su primo. Cuando su orgasmo estaba decayendo fue que noto que en los ventanales estaban llenos de rostros de jovencitos que luchaban entre sí para tener la mejor vista, entonces fue que ella se dio cuenta de donde se encontraba e inmediatamente, el placer se torno en vergüenza, Mary rápidamente se incorporó, se puso el vestido y salió corriendo del lugar dejando atrás la multitud de jovencitos que la seguían con la mirada, mientras reían entre ellos.

    El pitico en la computadora que le indicaba que otro mensaje había llegado, la saco de sus pensamientos:

    "Que pasa puta, será mejor que me respondas o estas fotos van directo a las manos de tu querido y amado esposo."

    Mary estaba sudando pero no de placer como fue aquel día, sino de miedo, sus manos temblaban mientras respondía el mensaje:

    "Cuanto quieres, yo te puedo pagar para que elimines esas fotografías"

    "Yo no quiero tu dinero perra."

    Respondía al mensaje, Mary quería desmayarse ahora, todos piden dinero en un chantaje y este extraño definitivamente la estaba chantajeando.

    "Que quieres." Respondió Mary tratando de sonar serena.

    "Ya lo sabrás puta, yo te contacto" con eso el tipo se desconecto.

    Mary no supo qué hacer, quería pellizcarse duro para ver si todo aquello era una pesadilla. Pero la verdad era que su pesadilla estaba a punto de comenzar.

    Trato de calmarse, tomándose alguna pastilla que la ayudara, como a veces hacía cuando se sentía agitada y de mal humor. Cuando asimilo que debía hacer frente aquella situación regreso a la computadora y empezó a ver cada una de las fotografías que le habían enviado. Las primeras fotos que abrió eran aquellas donde aparecían los niños pegados a la ventana, detallo una a una y a cada jovencito para ver si por alguna parte estaba la cara de su hijo, ella se sintió aliviada cuando después de revisar las fotografías de los niños no había ningún indicio que su hijo estaba presente. Después vio las demás fotos, todas fueron tomadas por alguien que parecía ser un profesional y con una cámara de muy buena resolución, la mayoría eran acercamientos de ella. La persona que tomo las fotos se aseguro de tomar el rostro de placer de una mujer que estaba disfrutando el momento, principalmente cuando ella mamaba aquel miembro. Si estas fotografías llegaran a manos de su esposo, ella no tendría ninguna escusa, que le iba decir, `que la obligó' jamás ni siquiera el esposo más tarado creería semejante tontería. Con esa cara de puta que se veía en primer plano.


    Continuará