Mi hermana de 8 años

Era una noche templada, yo tendría 7 años y mis padres salieron de fiesta. Iba de camino a mi cuarto y escucho que mi hermana de 9 años me llama a su cuarto y me dice que si podía dormir con ella ya que le costaba dormir, me pareció curiosa su propuesta porque no solíamos hacer eso, pero le dije que si. Ella me dijo que me quitara la ropa y que si quería dormir con ella tendría que ser sin calzoncillos, le dije que bueno. Recuerdo que solo nos iluminaba la luz de la luna que entraba por su ventana, me quité mi calzoncillo y me dió un poco de vergüenza que me viera el pene. Ella estaba completamente desnuda y me hizo acostarme a su lado, me empezó a tocar el pene y trataba de jalarlo hacia su vaginita que era lampiña como de cualquier niña, sus movimientos eran un poco torpes y le pregunté que era lo que hacía y me dijo que quería que le metiera mi pilin en su cosita, yo no podía creer pero ya sentía la excitación y deje que hiciera lo que quisiera y sin mucho esfuerzo penetré en su agujerito, fuí  algo torpe porque era mi primera vez y por lo visto de ella no lo era, ella me puso encima suyo y me enseñó a metérsela, yo solo atinaba a tocarle sus incipientes pechos y de rato en rato acomodar mi pene en la entrada de su vagina. Finalmente nos acostamos acurrucados y sentí su culo pegado a mi pene, podía ver la silueta de ese hermoso culo de niña y naturalmente acomodé mi pene entre sus nalgas, quisimos dormir pero se me volvió a parar y ella empujaba suavemente hacia atrás sus caderas, hasta que terminé penetrándola analmente, se sintió más rico aún y nos quedamos abotonados hasta que nos dormimos. Solo cuando nos hicimos adolescentes me animé a preguntarle cómo era que sabía todo lo que habíamos hecho y me confesó que uno de mis hermanos mayores se la cogió un par de veces pero que cuando lo hizo conmigo ya no quiso hacerlo con él y desde ahí fue mía. Esa fue mi linda iniciación.