Mi fantasía es sencilla. Cuando mi pareja esté dándole pecho a nuestra hija (o hijo) acercarme desnudo y pedirle que me coma la polla.
Que sujete mi verga con la mano y en ocasiones la frote con suavidad contra la carita de la peque. Y que en el momento de correrme, deje derraman mi semen caliente sobre sus pezones para que la beba se deleite con la leche paterna también, y al estar mezclada con la materna la trague sin problemas.
Así un día y otro hasta que se habitue a mi sabor. Y con el paso de las semanas eyacular directamente en esa pequeña boquita y poder alimentarla yo también.
Correrme sin reservas en su carita también sería otra acción que me gustaría hacer.
Quizá escriba un relato.