El Ascensor: Anécdotas de adolescentes claustrofóbicos, Parte 04 (Final)

Bazil.

Mi nombre es Bazil y tengo 16 años, soy el menor de los trillizos gemelos o trigemelos de mi familia, mis hermanos se llaman Leroy y Malik, nuestro nombre significa «rey» en diversos idiomas. 

A pesar de ser un joven alto, sigo siendo un poco más pequeño que mis hermanos, yo mido 1,74, Leroy, el mayor, mide 1,77 y Malik, el intermedio, mide 1,75, por otro lado, en lo que corresponde al departamento de pollas, he salido ganando, no es mucho, pero sigo ganando, la mía mide 20 cm., la de Leroy y Malik miden 18 cm. y son gruesas, al igual que la mía. 

Nosotros tenemos un secreto, bueno, varios secretos, uno es que nos hemos masturbado y chupado las pollas desde que tenemos 9 años, el otro es que cada uno teme a algo, en mi caso, sentirme encerrado me aterra, soy claustrofóbico y solo mis hermanos lo saben. 

Lo que les contaré ahora sucedió hace apenas unos días en el polideportivo al que asistimos junto a nuestro vecino Ryan, él juega fútbol y nosotros básquet -como bueno negros- el pequeño tiene 8 años y es un niño mestizo con unos ojazos hermosos de color azul cielo y un cabello rubio ceniza, además de un cuerpito bien definido, todo en él es hermoso, este ejemplar debe su belleza a su genética, su padre es un mapuche de Boroa y su madre es alemana. 

El polideportivo tienen varios pisos y secciones, en el último piso de la sección de descanso, se encuentran las duchas, saunas, baños a vapor y los vestidores, nosotros nos dirigíamos ahí junto al pequeño para poder refrescarnos e irnos a casa, cada sábado Ryan va y viene con nosotros, ya que nuestros horarios coinciden y hemos jugado con el pequeño desde que solo tenía 3 años y nosotros 11, hemos sido algo así como sus amigos niñeros, mis hermanos y yo amamos al pequeño granuja. 

Cuando subimos al ascensor mi corazón empezó a latir más rápido, sabía que no era muy probable que algo suceda, sin embargo, el solo estar encerrado con mis hermanos y el pequeño en ese espacio, me causaba un poco de angustia, Leroy agarró mi mano y me llevó adentro, mis hermanos siempre hacen eso por mí, cuando debemos subir a un ascensor y eso logra mantenerme a tierra el tiempo suficiente como para no sucumbir al pánico y llevar todo de la manera más normal, desde que descubrí mi temor, mis hermanos me han estado cuidando. 

Todo estaba normal, el ascensor empezó a subir, yo iba un poco nervioso, porque mi claustrofobia no es leve, es severa, pero solo en ascensores es así de fuerte, en otros espacios cerrados puedo relajarme yo solo, no es necesario estar junto a mis hermanos. 

Cuando llegamos al piso 3, el ascensor se detuvo y una voz por el intercomunicador nos avisaba que había un desperfecto, pero que no nos preocupemos porque dentro de 1 hora máximo, el problema estaría solucionado, el corazón se quería salir por mi boca, no podía creer que esté pasando esto, se supone que esto no pasa, es decir sí, pero no es muy probable. 

Sentí como mis dos hermanos me presionaron entre sí, tratando de calmar mi ansiedad, Ryan me veía sin entender lo que estaba pasando, para él, nosotros somos una especie de héroe, su personaje favorito de Marvel es Black Panther, para él, nosotros somos una representación de su héroe. 

¿Qué le pasa a Bazil? -preguntó muy curioso Ryan. 

Sabes que cada héroe tiene su debilidad, ¿verdad Ryan? -preguntó Leroy, tratando de llevar la conversación a algo que el pequeño pueda entender. 

Claro, el de Black Panther es la magia, no puede contra ella y siempre dicen que su arrogancia es su mayor debilidad, pero yo no sé qué es eso -contestó el niño con una amplia sonrisa. 

Exacto, la magia, vamos con ello. Así como tu héroe es débil contra la magia, cada uno tiene su debilidad, la debilidad de Bazil es estar en lugares cerrados, pero su debilidad más grande es estar encerrado en un ascensor que está atascado -explicó Malik. 

Ryan parecía estar pensando fuertemente en lo que le dijeron mis hermanos, cuando de la nada simplemente soltó. 

Si es débil a algo, debe existir algo para combatirlo, así como gemas, talismanes y así. 

Hay algo que calma mucho a Bazil, pero no podemos hacerlo aquí, es un secreto que nadie debe saber. 

Pero yo no voy a decir nada Leroy, yo sé guardar los secretos, soy muy bueno en ello. 

Qué tal si para poder calmar a Bazil, tú nos ayudas, así serás parte de nuestro secreto y no podrás contarle a nadie -comentó Malik a Ryan. 

¡Sí, sí, yo quiero! -gritaba el niño lleno de euforia mientras saltaba. 

Malik miró a Leroy, como pidiendo consentimiento de lo que se iba a hacer, además de ayuda. Mientras tanto yo, estaba completamente aterrado al borde del llanto, sin poder moverme y casi sin poder respirar, lo único que más o menos me mantenía en pie, era que mis hermanos no dejaron de abrazarme en ningún momento y me besaban la cabeza de vez en cuando. 

Sentí que Malik bajó hasta mi entrepierna y empezó a sobar mi polla por encima del pantalón deportivo, que me soben la polla siempre me relaja, pero en estos momentos no sabría si podía tener una erección. 

Todos los hombres tenemos polla, Ryan, a los hombres nos gusta y nos relaja que nos toquen la polla, mis hermanos y yo siempre hacemos esto. 

Pero nadie lo puede saber, porque es algo que los hermanos se supone que no hacen –le dijo Leroy a Ryan con una mirada muy seria. 

Ni los niños, para el caso -concluyó Malik mirando fijamente al pequeño. 

Por eso es que no podíamos compartir este secreto contigo, pero si vas a ser parte de nuestro secreto, tú también debes hacerlo, debes hacer lo que Malik está haciendo Ryan, así te creeremos que nunca vas a decirlo. 

Pero yo nunca he hecho nada de eso -respondió el pequeño con preocupación. 

Solo debes hacer lo que yo hago, no te preocupes, te enseñaremos. 

Ryan se acercó con un poco de temor y empezó a sobar mi polla por encima de la delgada tela, junto a las manos de Malik, mi hermano por momentos agarraba la pequeña mano y lo guiaba por mi polla morcillona, que ahora al sentir las caricias del pequeño, empezó a tener interés en el asunto, por otra parte, Leroy susurraba en mi oído lo hermoso que se veían Ryan y Malik de rodillas esperando ansiosamente que mi polla se ponga dura. 

Imagina que termina de ponerse dura y Malik te la chupa, hasta el fondo, como te gusta y de ahí juega con su ansiosa lengua alrededor de tu cabeza, cubierta un poco por tu piel. Cuando él termina de hacer lo que más te gusta, le dirá al pequeño y hermoso Ryan que lama tu polla, después le pedirá que la lleve a sus dulces pequeños y carnosos labios, Bazil imagina que nuestro pequeño se une a nuestros juegos, imagínalo, como sé que lo imaginamos cada vez que nos tocamos. 

Solo de pensar en Ryan chupándome la polla, después de mi hermano, fue suficiente para dejar de estar aterrorizado, la sola imagen del pequeño mestizo tomando entre sus lindos labios mi polla, me la puso dura al instante. 

Leroy seguía hablando todo tipo de fantasías calientes en mi oreja, mientras que cada cierto tiempo le daba amor con su lengua, imaginar todo lo que dijo que le haríamos al pequeño no solo me la puso dura, me la puso tiesa y sentí que la sangre seguía fluyendo hacia ella, pero había llegado a su tope. 

Ya está bien dura la polla de Bazil, Ryan, ahora hay que seguir relajando a mi hermano, es como una especie de hechizo, observa con atención. 

Malik bajó mi deportivo junto a mi boxer, liberando así mi polla, dura, venosa y en estos momentos morada, tensa de tanta sangre en ella. Al quedar libre la tomó con su mano derecha y empezó a pasar su lengua por todo mi tronco, para después con delicadeza tomar mi glande en su boca, chupándola suavemente, degustándola, enseñándole a Ryan cómo debe saborear la polla de un hombre. 

Mira a Malik Ryan, mira cómo mete esa hermosa cabeza casi morada en su boca, extrayendo el jugo que mana de ella, disfrutando su sabor, un verdadero hombre sabe disfrutar del sabor de otro hombre. 

Ryan miraba atónito y con mucha atención como la cabeza de mi polla era degustada por mi hermano intermedio. 

Ahora es el momento del mayor de todos los hechizos, no solo debemos chupar la polla de Bazil para que se relaje, debemos hacerle una buena mamada, cuando un hombre recibe una mamada, deja de pensar, su mente se pone en blanco y es libre, todo su ser disfruta. 

Por eso debemos aprender a hacer una buena mamada, o no va a funcionar. 

Es como si Dr. Strange no terminara su hechizo. 

Exacto, digamos que en estos casos nosotros somos como, Constantine o Dr. Destino. 

Ellos son de DC, prefiero Marvel. 

Lo que quiere decir Leroy, pequeño, es que debemos hacerlo bien, ahora ven es momento de que pruebes tu primera polla. 

El miedo ya había abandonado mi cuerpo con la mamada que me dio Malik, para desgracia mía, fueron solo unos 3 minutos, sin embargo, escuchar que ahora mi pequeño tendría mi polla en su boca, quito toda inconformidad del asunto. 

Ryan se pegó un poco más teniendo mi polla a la altura de sus ojos, miró mi cara de placer mezclada con expectativa y él solito sacó su lengua y le dio una lamida tentativa, degustando tentativamente el sabor de mi polla, al parecer no le pareció desagradable, porque ahora sin timidez y con un poco de entusiasmo empezó a darle varias lamidas, las cuales me hicieron lanzar un suspiro de placer y satisfacción. 

Eso es pequeño Ryan, sigue lamiendo esa polla negra, pásale tu lengua y vuelve loco a tu macho, no te olvides de chupar su cabeza, eso va a volver loco a nuestro Bazil 

Recuerda chupar fuerte sin lastimarlos con tus dientecitos bebé, porque eso le hará doler a nuestro hermano –indicaba Malik 

Leroy y Malik seguían hablando con Ryan, dándole indicaciones de lo que debía hacer con su boca, mientras tanto yo observaba al pequeño esmerarse en darme placer con su lengua, recogiendo todos mis jugos y saboreándolo gustosamente. 

Leroy había dejado de abrazarme y comerme la oreja, se había colocado detrás mío y había subido mi musculosa colocándola detrás de mi cuello y estaba estimulando mis pezones, los cuales son muy sensibles a estímulos y hacen que mi polla chorree más de mi jugo de hombre. 

Vi como Malik guiaba a Ryan para empezar a chupar mi glande, Ryan acató todas las indicaciones y empezó a succionar como un ternero de la ubre de su madre, fue tan delicioso sentir su boca que nada se comparaba a ello, ni las mejores mamadas de Malik podían compararse a la succión necesitada del pequeño mestizo. 

El intermedio dejó a Ryan chupando a gusto y subió hasta mis pezones donde estaban las manos del mayor apretándolos y dándoles amor, Leroy al ver que la cabeza de Malik bajaba hasta mis pezones, descendió besando mi espalda llegando hasta mi culo, abrió mis nalgas y metió su cara directamente en mi oscuro asterisco, sentir su lengua siempre era la gloria, era el único de los tres que se animaba a darle amor a nuestros culos, nosotros lo habíamos intentando, pero definitivamente no era lo nuestro, al menos no con los culos de los que hemos dispuesto. 

Yo solo gemía y gemía, perdido en el placer que recibía de tres lugares diferentes, Malik cambiaba entre succiones, lamidas y mordidas, en verdad había aprendido a dar amor de la mejor manera a los pezones, cualquiera que lo tuviese como amante estaría más que feliz, sabe hacer buenas mamadas y realmente se dedica a darle placer al cuerpo de su compañero. 

A diferencia de Leroy, que realmente no se asumía como gay, sino como bisexual, Malik y yo estamos completamente seguros que nuestras pollas no se ponen duras por los coños o las tetas, lo intentamos, desde los 12, pero realmente no nos fue muy bien, por otro lado, Leroy se ha follado a varios compañeros y compañeras de salón y otros salones, el intermedio y yo solo nos hemos follado hombres, literalmente hombres, incluso nos follamos a nuestro profesor de matemáticas, le dejamos el culo roto, le hicimos una doble, aparte nos hemos follado uno que otro vejete del polideportivo, lo hicimos más por el morbo de follar hombres mayores. 

Sentí que estaba por correrme y se los hice saber casi entre líneas, antes Malik logró entender lo que medio susurraba, gritaba y gemía, mi hermano apartó delicadamente a Ryan de mi polla. 

Muy bien cariño, es momento de dejar descansar un poco a Bazil, estaba por tirar todo su jugo de hombre en tu boca y todavía no es momento de eso. 

Tuve que dejar de lamer su culo, sentí como sus mejillas se apretaron, estaba listo para disparar su carga y por la manera en la que se tensó, iba a hacer una muy buena carga. 

Ehhh, chicos, por muy caliente que sea verlos, les recuerdo que los ascensores tienen cámara, por ahora solo estoy yo, así que, por favor, en otra ocasión, no repitan lo que acaban de hacer, por muy caliente que sea. 

No se preocupe Don, solo estamos tratando de calmar a mi hermano, usted puede seguir observando y hacerse una paja a nuestra salud. 

Bueno -dijo el hombre carraspeando-, la verdad es que ha sido muy sexy ver la polla de su hermano y el cómo lo tocaban, por eso hice algo, sé que no es muy bueno de mi parte, pero les dará tiempo. Hablé con el jefe de bomberos y él no ha dado la alerta, claro que no he dicho el por qué necesitan tiempo, mentí diciendo que ustedes siempre me juegan bromas. 

Eres un pervertido señor guardia -acusó juguetonamente Malik. 

No es culpa mía, ustedes me están dando un buen espectáculo. 

¿Quieres alguna recompensa por ser tan servicial? -preguntó Leroy con su voz más sensual. 

Ustedes creen que cuando salgan, ¿puedan follarme?, los 3. 

Si estás con tu uniforme, puedo follarte toda la noche -dije con mi recuperada voz, sonando como recién despierto. 

Podemos hacerlo, solo es que nos des tu dirección, estaremos ahí. 

Entonces pueden continuar, con lo que quieran, tienen hora y media más antes que el departamento de bomberos llegue. 

Chicos, harán que tenga bolas azules, me acaban de pasmar la corrida más fuerte que iba a tener en mi puta vida. 

Hay que guardar esa carga para algo mucho mejor, ¿no es así Malik? 

Sí hermano, no te vas a arrepentir. 

No sabía lo que Leroy y Malik tenían planeado, pero mis hermanos mayores jamás me han decepcionado, así que solo acepté su decisión, aunque mis bolas no estuviesen muy de acuerdo. 

Malik y Leroy me desnudaron por completo y me sentaron en el piso del ascensor, mi fobia estaba bajo control u olvidada por completo gracias a todo el placer que le dieron a mi cuerpo. Mis hermanos también se desnudaron se acercaron a Ryan y lo desnudaron, después hicieron que ponga en 4, sus ropas debajo de sus rodillas para que el pequeño no se lastime y mi polla en su boca. Leroy fue al culo redondo y bien formado del menor y empezó a tantear con su lengua todo su exterior, lamió ambos globos, los mordisqueó juguetonamente y cuando se cansó de probar todo el culito mestizo abrió sus bien formados globos y empezó a explorar su interior. 

Malik por otro lado tenía sus 18 cm de polla en la mano masturbándose viendo para arriba, dándole un espectáculo al guardia que nos estaba observando, nuestro guardia voyerista seguramente tenía un buen espectáculo privado. 

Deberías probar el culo de Ryan, Bazil, es pura ambrosía, el mejor culo que he probado, creo que me haré adicto a comer culo de nenes. 

Yo poco podía creer que un culo tenga buen sabor, sin embargo, tanto era el éxtasis en la cara de mi hermano mientras seguía hundido entre las mejillas de Ryan que realmente decidí probar. 

Diciéndole a mi hermano mayor que cambiemos de posición, me puse detrás de Ryan mientras Leroy ahora era chupado por Ryan y vi que Malik se acercó a la boca de Leroy para que le chupe su polla. 

La primera impresión que tuve de mamar culo me dejó con la convicción de no volver a hacerlo, pero el culo de Ryan no era como el de Malik o el de Leroy, de verdad lo sentí delicioso y me hundí en él, queriendo probar más y más de su sabor, nunca me he comido un culo con tal exquisito sabor, sabía a limpio y al mismo tiempo alcalino, era un sabor terroso como mezclado con miel, no podía descifrar los diversos sabores que pasaban por mi lengua, pero no podía parar de querer probar más de ellos. 

Estuve hundido en el culo de Ryan por más de 20 minutos, mientras el pequeño solo gemía y suspiraba por el placer que le estaba dando y el placer de tener la polla de Leroy en su boca, cuando pensé que era suficiente de mamar ese rico ojete, procedí a tentativamente ingresas un dedo, mi dedo índice empezó a hacer pequeños círculos alrededor del pequeño asterisco que se había dilatado después del tiempo que mi hermano y yo le hemos dedicado a lamer, chupar y sorber. 

Mi dedo ingresó casi sin resistencia, mis hermanos observaban lo que hacían y les dominó la calentura, Malik se puso a un lado de Leroy e hizo que Ryan empiece a mamar ambas pollas, alternándose entre una y otra, desde que empezamos todo este viaje de placer, Malik no había tenido oportunidad de recibir placer por parte del pequeño y se nota que le encanta tenerlo chupándole la polla. 

 Después de estar haciendo círculos con mi dedo dentro de ese culito, procedí a ingresar mi segundo dedo, con un poco de resistencia e incomodidad por parte de Ryan, el cual empezó a moverse, tratando de liberarse de la invasión que sufría su culo, pero no podía dejar de abrirlo, quería follarlo, necesitaba entrar en ese culito. 

En mi bolso de entrenamiento tengo lubricante 

Que Dios te bendiga Malik 

Qué te diré, soy un chico preparado, pero solo hay un sachet, deberá ser suficiente para ti, por hoy hermano, te lo mereces, disfrútalo. 

A pesar de todo, mis hermanos seguían preocupados por mi claustrofobia, pero no tenían que estarlo, mi menta estaba en cosas muchas placenteras, como, por ejemplo, desvirgar a nuestro querido mestizo Ryan. 

Malik se acomodó mejor y empezó a guiar a la mamada que le hacía el que ahora se convertía en nuestro pequeño, nuestro, más nuestro de lo que nunca fue, por otra parte, Leroy empezó besando el cuello, la espalda y todo lo que estaba a la vista del cuerpo de Ryan, tratando de que esté en calma y que mitigar el dolor que estaba por sentir, porque ninguno estaba fuera de sus sentidos, mis hermanos y yo estábamos conscientes que le iba a doler, pero ninguno se iba a detener por ello. 

Escúchame pequeño, es momento de ser el héroe de Bazil, él va a poner su polla en tu culito, te va a doler mucho, pero debes de aguantar, recuerda, él te necesita, él necesita que lo ayudes a alejar su miedo. 

¿Va a doler mucho? 

Te quisiera decir que no Ryan, pero sí te va a doler, la primera vez siempre duele. 

Leroy y Malik seguían disfrutando del cuerpo de Ryan mientras le advertían lo que iba a sucederle, yo empecé a dilatar su culito, le puso todo el lubricante que pude y lo fui abriendo con mis dedos, puedo decir que a pesar de toda la incomodidad que debió sentir, Ryan no se quejó y aguantó como un campeón, fue fuerte y valiente. 

Miré a Malik para que entienda que ya iba a suceder, iba a llenar el culito de nuestro pequeño con mi gran polla negra, él sostuvo la cabeza de Ryan haciéndole presión hasta abajo, mientras yo entraba por detrás lo más rápido posible, pude ingresar mi cabeza y unos 4 cm antes de sentir cómo ese pequeño culito quería expulsar a invasor, el que estaba padeciendo el dolor de ser invadido se empezó a mover de manera desesperada, se escuchaban sus grititos amortiguados y sus lágrimas rodaban por su rostro, nos miraba con dolor, puedo suponer que hasta se sentía traicionado, pero no podíamos hacer nada al respecto, nos han dicho que la primera vez que te rompen el culo siempre duele. 

Mírame Ryan -ordenó Leroy. El pequeño solo lo miró con un inmenso dolor- Sé que duele, he desvirgado a muchos, chicos y chicas, siempre duele bebé, nosotros no podemos hacer nada, pero tú, tú eres nuestro héroe, el héroe de Bazil, solo debes aflojar el culito, como si fuera a hacer popó, solo afloja y relájate, déjalo entrar. 

Si lo dejas entrar, será más suave y no te va a doler por mucho tiempo, así que bebé, hazlo, tú puedes, mis hermanos y yo sabemos que puedes –animaba Malik, mientras empujaba más de su polla en la boca del desesperado Ryan y al mismo tiempo acariciaba su cabeza y Leroy su espalda. 

Sentí como el pequeño trataba de relajarse y cada cierto tiempo apretaba el culito, estaba batallando internamente por hacer lo que le decían y lo que sentía mientras mi polla iba entrando dentro de él. 

No sé cuánto tiempo me tomó estar hasta las pelotas dentro de Ryan, pero sé que fue un trabajo arduo y de mucho tiempo, me quedé completamente quieto, esperando que el estrecho y cálido interior se adapte a mi tamaño, estuve completamente quieto unos 3 minutos, mientras que Leroy estimulaba mis pezones con su boca y de vez en cuando compartíamos un beso con lengua, todo sucio y desordenado, completamente excitados de que esté desvirgando al niño de nuestros sueños. 

Cuando retiré poco a poco mi polla vi que ya no apretaba tanto y Ryan no trataba con mucha fuerza de expulsarme empecé a follarlo lentamente, muy lentamente, era tan lento, que era casi matador para mis bolas, tenía la sensación de correrme, pero no quería hacerlo, quería dejar bien follado a mi tierno niño. 

Después de varios minutos de estar follándolo lentamente, el cuerpo de Ryan cedió y se relajó por completo, apenas sentí que se relajó empecé a darle cadera como un perro callejero, no podía detenerme, estaba persiguiendo el orgasmo que se me había negado en varias ocasiones y el solo pensar que dejaría mi leche en el culito de mi niño, bautizándolo, me tenía a mil, pasaron 10 minutos y no pude más rugí con fuerza y le djé toda mi leche dentro. 

Todo fue salir y Leroy se escupió en la polla diciendo que no podía desaprovechar la oportunidad, metió su polla dentro de Ryan que se sorprendió al sentirse nuevamente invadido, pero no dijo nada, solo se rindió a su destino, le sonrió a Leroy y le dijo que ahora era tanto el héroe mío como de él, su inocencia era algo que amábamos demasiado y como Malik no quería desaprovechar la oportunidad, le dijo que él necesitaba un héroe y el niño sonriendo con cansancio le dijo, que él podía ser el héroe de los tres. 

Oímos la voz por el intercomunicador que nos avisaba que en 25 a 30 minutos llegaban los bomberos, que debíamos apresurarnos, no fue más que Leroy se empezó a follar a Ryan con verdadera fuerza y pasión, queriendo alcanzar su orgasmo y unir su corrida a la mía en el interior del pequeño. 

Pasaron unos 10 minutos y escuché a Leroy acabar dentro de Ryan, al momento que nuestro hermano mayor salió, el intermedio tomó el lugar vacío y empezó a follar a Ryan con verdadera fuerza de macho, Ryan estaba rendido y solo se dejaba hacer, pero se podía oír débilmente sus gemidos, a pesar de todo, el pequeño estaba disfrutando el ser follado por los trigemelos. 

15 minutos después Malik también estaba acabando en los más profundo de ese culito, llenándolo de su semilla y mezclándola con la nuestra, si Ryan hubiese podido eyacular, sé que lo hubiese hecho, ya que varias veces mientras lo follábamos gemía y se quedaba quieto, salpicando unas gotitas de orina o presemen, no lo sé con certeza, luego su polla de nene perdía firmeza para recuperar vitalidad minutos después. 

Están llegando, están a 3 minutos de ustedes, deben limpiar al pequeño, rápido. 

El guardia se escuchaba un poco nervioso, pero Leroy yo ya estábamos cambiados y limpios, así que mientras Malik se vestía y limpiaba con su toalla, yo con mi toalla limpié el sudor del pequeño y le dije que puje fuerte, mientras mi hermano le limpiaba el culito, el cual estaba con restos de sangre y heces, por ser la primera vez y algo improvisado, no nos fue nada mal, pero debíamos enseñarle a Ryan a estar limpio para nosotros. 

Pasados tan solo unos segundos de que estuviésemos completamente listos y limpios, escuchamos una voz decirnos que no nos asustemos que los rescatistas ya habían llegado y nos sacaría de ahí en solo unos minutos y así fue, tan solo 5 minutos y ya habían accedido a nosotros y empezaron a sacarnos de uno en uno. 

Aquí huele a sudor y a sexo -dijo el bombero que bajó por la rejilla. 

Somos jóvenes en toda la edad sexual, siempre olemos a sexo cuando sudamos. 

Deberían mantener esas manos quietas, hacerse mucho la paja los hará impotentes. 

No se preocupe Don, nosotros no solo vivimos de paja, ya sabe lo que dicen, no solo de pajas vivirá el hombre. 

Hey muchacho, que sé bien lo que dice, no solo de pan vivirá el hombre. 

Pues pan, pan, mi Don, pan, pan -respondí riendo. 

El guardia nos esperaba afuera y pudimos ponerle rostro a la voz, un hombre en sus 25, medía más o menos 1,74, delgado, pero marcado, piel blanca como la leche, ojos verdes y cabello castaño, sí definitivamente iríamos a visitar a ese hombretón. 

Al salir de ahí todos nos dirigimos a las duchas, limpiamos a Ryan a conciencia y le preguntamos si se encontraba bien, solo se encontraba cansado y nos preguntó si podíamos hacerlo en algún otro momento, que él había disfrutado mucho ser nuestro héroe y prometía guardar el secreto. 

Está de más decir que desde ese día nos hemos estado follando a Ryan, a nadie se le hace extraño que estemos con él por varias horas, porque siempre lo hemos amado, cuidado y jugado con él, ahora lo seguimos haciendo, solo que ahora como hombres y él como nuestro niño, sé que siempre lo querremos con nosotros, solo espero que nunca se enamore y siempre nos quiera con él. 

Y por si les interesa saber, fuimos a la casa del guardia esa noche y quedamos en ir cada sábado de noche, porque a pesar de lo varonil que se ve, es todo un puto tragapollas, esperamos que pronto pueda enseñarle a Ryan a ser una verdadera puta, como lo es él. 

Sin más que contarles, solo debo agregar, que mi experiencia traumática en un ascensor, se convirtió en el día más feliz de mi vida. 

Fin