Ni bien se fue Eduardo; me dirigí al galpón donde se encontraba la niña. Esta ya había recobrado el sentido y se contorsionaba en el piso tratando de librarse de sus ataduras a la vez que lloraba.
Le quite la mordaza y la niña comenzó a gritar; pero una bofetada mía en su rostro la hizo callar. Acerque a sus labios un vaso con agua; la cual bebió desesperadamente. En el agua había disuelto una buena cantidad de barbitúricos; los cuales al poco tiempo la hicieron dormir nuevamente.
La lleve a la casa y no sabía porque; pero su rostro se me hacía conocido de alguna parte. Después de que la recosté en el sillón; comencé a investigar sus pertenecías y las de la mujer fallecida. Entre estas; encontré sus documentos identificatorios, algunas alhajas y dinero y también unas pequeñas libretas que parecían ser bitácoras de viaje. La anotación más antigua era de hacía casi tres años antes.
El nombre de la niña era Laura, tenía según sus documentos 10 años. Con los datos que poseía inicie una exhaustiva búsqueda en internet. En la website de missing children encontré la foto de la niña y la de la mujer fallecida que resulto ser su madre.
Hilvanando las páginas web y lo que estaba escrito en las bitácoras; descubrí que la madre de la niña la había dado en adopción siendo la niña recién nacida. El matrimonio adoptante era del nordeste del país; más precisamente de una zona que se la denomina la triple frontera. Al parecer; con el tiempo, la madre supo que había sido vilmente engañada por dinero y que la niña recibía malos tratos y fue a buscarla. Allí se produjo un altercado que acabo con la vida del matrimonio y la desaparición de la madre e hija. Según reportes policiales y las anotaciones; la mujer apuñalo a los padres adoptivos, hasta darles muerte; sustrajo todo lo material que pudo y se llevó a la niña que estaba muy golpeada. Descubrí también; que el caso había sido cubierto por los medios informativos y que mucha gente quedo involucrada por falsas adopciones, prostitución infantil y adulta ya que el matrimonio era familiares de políticos de la zona.
Tanto la madre como la niña; aun eran buscadas por las fuerzas de seguridad para dar parte en la justicia. Esto me otorgaba cierto poder de manipulación hacia la niña que decidí explotar.
Me despertaron los gritos de auxilio de la niña. Me acerque a ella sigilosamente y siseando le quite la venda de los ojos. Tardo un segundo en acostumbrarse a los rayos solares que ingresaban por los ventalles de la casa; pero al final pude ver los hermosos ojos celestes que tenía.
La niña al percibir mi presencia se calló y así permaneció al observar mi rostro. Comenzó a quitarle las ataduras de sus pies y manos. Mientras lo hacía; le dije que no debía tener miedo; que era un amigo de su madre y que esta la había dejado conmigo ya que había decidido rendir cuentas ante la justicia. Le dije que sabía todo sobre ella y lo que le había sucedido. Trate de ser lo más convincente posible; al mentirle sobre mi conexión con su madre y sobre la ayuda que le brindaría.
Laura se frotaba donde había tenido las sogas que la inmovilizaban y lo único que pregunto era por qué la habían atado y amordazado. Le respondí que había sido su madre la que lo había hecho y que lo hizo para que pudiera tener tiempo para alejarse, abandonándola. La niña sollozo brevemente.
Un leve rugido de su estómago me hizo pensar que la niña estaba famélica; así que prepare un abundante desayuno, el cual devoro con rapidez. Mientras lo hacía; le dije que la haría pasar como una sobrina lejana y después de darle algunas reglas sobre cómo debía comportase. Laura solo escuchaba y asentía con su cabeza todo lo que le decía.
Le mostré cuál sería su habitación y entregándole el bolso con sus ropas le dije que le acomodara como ella quisiera. La habitación poseía un pequeño cuarto de baño contiguo y las ventanas poseían rejas. Le dije que tendría que ir a la ciudad y que ella se quedaría en la habitación mientras tanto. Por seguridad; al salir cerré la puerta con llave desde afuera.
Durante el resto del día; observe por las cámaras de seguridad a la niña. Durante casi todo el día estuvo sentada contra una pared en posición fetal llorando y pensando. A la noche; le abrí la puerta y excusándome por haberla dejado tanto tiempo allí encerrada. Prepare la cena para después de comer volver a llevarla a la habitación y encerrarla.
El día lunes; cuando Belén llego a la finca, no solo se encontró con la niña, sino que también había unos albañiles que había contratado para que realizaran los trabajos en el sótano. Note que Belén sentía algo de celos por como trataba a mi seudo sobrina ya que trataba de estar con ella y enseñarles cosas tontas.
Los trabajos en el sótano tardaron más de 15 días y durante ese tiempo; como había obreros no tuve sexo con Belén, pero si le administraba buenas cantidades de éxtasis, cocaína y marihuana.
El acceso al sótano se transformó en una especie de falsa pared con puerta secreta y su interior había unos sanitarios a la vista; ya que sus paredes eran de cristal. Había dos pequeños calabozos de 2 por 3 metros con sus correspondientes puertas metálicas y en el resto del área había lo que parecía ser una cama algo mayor que una matrimonial y una serie de extraños muebles y maquinas que habían sido modificadas para cumplir alguna extraña función. En una de las paredes había una estantería; en la cual había sogas, juguetes sexuales de todo tipo y tamaño; como así también frascos con aceites y cremas, medicamentos e implementos médicos varios. El lugar en sí, lucia como una especie de sala de operaciones y de torturas con aislamiento sonoro en sus paredes y techo.
Unos días después de que estuviera terminada la mazmorra; llame a la madre de Belén y con un pretexto tonto la convencí para que la dejara pasar unos días conmigo. La llamada la realice sabiendo que Belén estaba ya en camino hacia la finca y que no sabría que había hablado con su madre.
Unos minutos más tarde; Belén llego a la finca y como de costumbre me pidió la administración de sus drogas, las cuales le di. Se notaba que la quinceañera ya era toda una adicta y que para recibir sus drogas haría lo que sea. No le importo inhalar un par de líneas de cocaína frente a Laura; a la que desde hacía unos días le administraba pequeñas dosis de MDMA y que se comportaba muy alegre y risueña.
Después de colocar en la boca de Belén una píldora de éxtasis, le ordene que se quitara la ropa. Mientras lo hacía, le di a Laura una píldora de benzodiacepina; que con algo de temor la ingirió mientras observaba a la adolescente desnudarse. Sin objeción de su parte; la niña de 10 años permitió que le quitara su vestido floreado primeramente y después el resto de sus prendas hasta dejarla desnuda.
Tome de las manos a las niñas y las conduje hacia la mazmorra. Las niñas no entendieron el significado de lo que veían en la habitación. Hice que Laura se recostara sobre un mueble que parecía una camilla y desde allí observo como con unas sogas que había tomado comencé a maniatar a la quinceañera.
A Belén; primeramente le realice lo que se llama “SHINJU o LAS PERLAS” en la jerga del bondage, esto consiste en sujetar los pechos haciéndolos más esféricos. Esto hace que la piel de los pecho se hagan más sensibles al tacto con cualquier cosa; como así también los pezones.
Con otro par de sogas; la posicione el cuerpo de la quinceañera en lo que también en el bondage se denomina “STRAPPADO”. Esto consiste en atar las manos y brazos por detrás de la espalda de la víctima, para luego elevarlas obligándola a que flexione el tronco, quedando sus manos por encima de su cabeza. Por ultimo; separe las piernas de Belén y las inmovilice por los tobillos con un cepo metálico.
Tome de una mano a Laura y la conduje hacia donde se encontraba Belén. Le pregunte a la niña que le parecía lo que había hecho y está riendo solo dijo que le resultaba raro. La quinceañera miro de una forma rara a la niña mientras le colocaba una bola mordaza en su boca; parecía como si intuyera que ese día seria el fin de las dos.
Volví a llevar a Laura hacia la camilla y esta vez la hice recostarse en ella. Diciéndole que esto era solo un juego, sujete sus brazos a cada lado del mueble; para después también sujetar sus piernas que permanecían juntas. Accionando un botón; las piernas de la niña comenzaron a separarse una de la otra, aunque esta intentara no podía evitarlo. En pocos segundos sus piernas quedaron semiflexionada y abiertas, como si estuviera en una camilla ginecológica.
Me coloque entre sus piernas y diciendo que dudaba de su virginidad ya que sabía casi todo lo relacionado a ella; la examinaría con un especulo vaginal, el cual le mostré. La niña comenzó a contornear su cuerpo tratando de librarse de las ataduras y a gritar. Esto último; me obligo a colocarle una bola mordaza en su boca.
Lubrique el aparato y lo introduje levemente para después abrirlo y de esta forma pude observar que aún tenía su himen intacto; lo cual me sorprendió. Se lo dice saber a la vez que retire el instrumento médico. La niña lloraba desconsoladamente y emitía gruñidos inentendibles. Tome dos balas vibradoras de la estantería y con la ayuda de cinta adhesiva coloque una sobre su vestíbulo vulvar y en su ano. Al encenderlos; la niña se contorsiono fuertemente como queriendo quitárselos y liberarse de las atadura.
Me quite la ropa; mientras lo hacía, le dije a Laura que cuanto más se resistiera peor seria para ella. Por unos segundos; la niña pareció tranquilizarse, pero cuando vio mi descomunal verga de 26 x 8 centímetros se asustó y comenzó a llorar desconsoladamente.
Me coloque detrás de Belén; había presenciado en primer plano lo anterior y sin ningún tipo de juego previo ensarte mi verga en su vagina de forma violenta. La quinceañera soporto mi estocada; ya que estaba acostumbrada a mis envistes y la situación parecía haberla excitado un poco.
Me moví frenéticamente, sin importarme su dolor o placer. Mientras lo hacía; oprimíamás aun sus pechos cautivos por las cuerdas. Hice mi primer descarga en su útero e inmediatamente después retire mi verga aun erecta y se la introduje de forma igual de violenta en su ano. Esto la hizo chillar con bravura. Para cuando comencé a descargar por segunda vez; pude sentir como su esfínter se contraía sobre mi verga en señal de un fuerte orgasmo que la invadía haciendo temblar todo su cuerpo.
Le quite toda las ataduras a la quinceañera y después la hice sentaren una vieja silla de barbero. Sujete sus brazos en los apoyabrazos. En sus recientemente penetrados agujeros y de los cuales brotaba mi semen deposita; introduje unos vibradores en forma fálica y los encendí.
Me aproxime a la camilla en que se encontraba Laura. Parecía tener pequeños temblores en su cuerpo a causa de las bolas vibradoras y estaba relajada, como en trance. De un fuerte tiro quite las cintas adhesivas y con ello las bolas; esto hizo que su trance se interrumpiera y me mirara con preocupación y miedo.
Me sorprendió que la zona de su vulva, perineo y ano estuviera extremadamente humedecida por un líquido incoloro; pero con un fuerte olor similar al flujo femenino. Palpe y succiones sus pezones tratando de encontrar si ya había comenzado a desarrollar sus glándulas mamarias según los estados de Tanner.
Tome una jeringa y le inyecte una dosis de hormonas femeninas para que con ella se incrementara su desarrollo. Después de ello; la obligue a que aspirara por primera vez en su vida una línea de cocaína. El efecto de esta se notó enseguida calmándola.
Comencé a lamer su vulva y su ano; lentamente la niña comenzó a gemir susurradamente. Mi verga empezó a erguirse nuevamente y para cuando lo completo; la posicione entre los labios vaginales de la niña.
El primer intento de penetrarla la hizo sobresaltar y que gracias a que se encontraba bajo los efectos de las drogas no se resistió. En el segundo intento; solo mi glande si introdujo y aunque hubiera deseado penetrarla de un solo estocada; algo me decía que debería hacerle gozar su primera vez.
Mi glande y unos pocos centímetros se introducían en esa vagina infantil de 10 años. Laura había comenzado a gemir ante mis movimientos y en una de las veces en que retire completamente mi ariete; pude ver que la punta de esta estaba cubierta con algo de sangre.
Hice una breve pausa en la penetración de la niña; en la cual con la ayuda del especulo vaginal pude constatar que su virginidad ya no se encontraba. Esto me alegro y continúe penetrándola suavemente como lo había estado haciendo antes.
Pronto los gemidos de Laura comenzaron a incrementarse, al igual que su respiración. Segundos después de que ella comenzara a convulsionarse por su orgasmo; yo realice mi descarga de semen directamente dentro de su infantil útero.
Laura se desmayó poco después y pude escuchar mientras la desataba, como Belén tenía múltiples orgasmos gracias a los adminículos insertados en ella. Lleve el cuerpo de la niña a uno de los calabozos y la encerré allí.
Fui donde se encontraba la quinceañera; que lucia exhausta y después de quitarle las ataduras; la conduje al otro calabozo.
Durante cuatro días, el modus operandi fue el siguiente. Las alimentaba, las drogaba y las sodomizaba a mi gusto y en distintas formas y posiciones. A mitad del últimodía; fui algo benevolente con Belén, ya que debería de regresar a su casa. Por en cuanto a Laura; el calabozo se convirtió en su nueva habitación.
Durante esos días; mi amigo Eduardo se suicidó disparándose en la cabeza dentro de su auto. Dejo una escueta nota donde decía que debía mucho dinero y que ya no podía seguir viviendo con su cargo de conciencia. Personalmente me entere de ello cuando lleve a Belén a su casa; pero no me sentí afectado por la decisión que tomo mi amigo.
Pero lo que si me afecto; fue enterarme al día siguiente que la madre de Belén había fallecido a causa de su incurable enfermedad. Aclaro que no me deprimió esto; sino que sabiendo que la quinceañera totalmente adicta a lo que le suministraba, ahora debía hacerse cargo de ella y de su pequeño hermano ya que la madre la había emancipado legalmente y eso la hacía su tutora. También sabía; que la enfermedad les había endeudado mucho y aunque yo les entregaba una buena cantidad de dinero, este nunca les alcanzaba. En conclusión; la quinceañera era una bomba de tiempo muy peligrosa para mí y debía hacer algo al respecto.
Fui citado a declarar en la investigación del suicidio de Eduardo; ya que en algunos aspectos parecía raro como me había hecho yo con sus negocios. Yo me valí de algunos detalles técnicos legales para aclarar esa situación. De forma extraoficial; me entere que había encontrado restos de sangre de una persona que estaba sindicada como doble asesina hacia unos años atrás refiriéndose a la madre de Laura y que también había descubierto algunas huellas de la niña. Nadie se explicaba cómo habían llegado allí esas evidencias y que relación tenían con el suicido. Yo; por mi parte negué tener conocimiento de ello.
Belén concurrió a mí; no solo por sus dosis de drogas, sino que también por algo de ayuda. Cuando fue, estaba acompañada por su pequeño hermano; un niño de 6 años y con un aspecto algo afeminado. Aunque los varones no me agradan, algo en el me llamo la atención.
Belén me detallo los problemas no solo económicos que tenía; sino que también los de ser la tutora de su hermano. Mientras lo hacía; inhalo algunas líneas de cocaína para darse valor. Tuve que detenerla, ya que si seguía aspirando droga podría morir de sobredosis y eso si arruinaría no que estaba planeando.
Le dije a la quinceañera que en la ciudad dijera que yo cubriría sus deudas y que además le había conseguido un nuevo trabajo en otra ciudad. Después de pagar las deudas y de subir a mi camioneta las pocas pertenencias que tenían Belén y su hermano nos dirigimos hacia la finca. Esta sería la última vez que alguien vería a Belén y a su hermano Mateo en la ciudad.
Durante más de un mes, nos comportamos casi como si fuéramos una familia. Los poco e inusuales visitantes que tenía, jamás vieron a Belén o a Mateo allí, ya que estos se escondían como habíamos pactado como condición a su permanencia.
Belén y yo alimentábamos secretamente a Laura que permanecía en la mazmorra y ocasionalmente la sodomizaba levemente. Las inyecciones de hormonas que le aplicaba a la niña rápidamente le habían hecho florecer los pechos y al parecer el exceso de estas le hacía lactar. Además de las hormonas; a la niña se suministraba una droga hipnótica que acompañada de efectos audiovisuales dentro de su calabozo la transformaron rápidamente en una pequeña muy sumisa y pasiva niña.
Esto me dio la idea de hacer lo mismo con el pequeño Mateo; lo cual hacía con la excusa de que eran vacunas especiales. La mayoría de las veces, lo hice a escondidas de la quinceañera y cuando esta estaba semi inconsciente por las drogas; lo hacía frente de ella. Sabía que esto le ocasionaría problemas médicos al niño; pero no me importaba. Para mí era otra víctima de mis perversos juegos sexuales.
Un día; Belén descubrió el poder de lactar que tenía Laura y se deleitó succionándole sus tiernos pechos. Yo observe eso gracias a las cámaras de video que también había colocado en la mazmorra. Raudamente me dirigí allí para presenciar ese espectáculo.
Al verme allí, Belén sonrió cómplice hacia mí. Pero su sonrisa se borró rápidamente ya que vio que Mateo estaba conmigo. Talvez algo de instinto maternal afloro en ella al suponer que algo podría hacerle a su pequeño hermano y con una fiereza jamás vista en ella comenzó a atacarme con golpes de puño. Gracias a mis conocimientos de artes marciales; los eludí y la sometí llevándola al suelo. Allí la inmovilice con el peso de mi cuerpo y aplicando unas técnicas marciales hice que perdiera el conocimiento momentáneamente.
Para cuando recupero la conciencia; Belén se encontraba suspendida en el aire sujeta por múltiples sogas que la hacían formar una X en el medio de la mazmorra.En su cuerpo poseía varias ataduras del tipo bondage; entre ellas el “SHINJU”, el “SAKURANBO” y el “KARADA”; estas estaban conectadas a las sogas que la mantenían en suspensión. En su ano le había introducido un "bondagehook"; que es gancho metálico que en la parte introducida poseía una esfera de 4 centímetros de diámetro y que en la parte externa se conectaba a una soga unida a su cuello. En su boca tenía puesto una “ballgag” como mordaza y en uno de sus brazos le había colocado una vía intravenosa; la cual le suministraba suero y medicamentos desintoxicantes. Inmediatamente comprendió que algo terrible le ocurriría y comenzó a llorar entristecidamente.
Le quite la mordaza para escuchar lo que intentaba decirme pero que no entendía. Suplico por su vida y dijo que haría todo lo que le ordenara sin impórtale nada; lo último que dijo fue que la matara de una vez y que acabara con su sufrimiento. Después de esto; volví a colocarle la mordaza.
Por primera vez, estando consiente. Presencio como desnudaba a su pequeño hermano frente a ella y le inyectaba una dosis de hormonas femeninas y de la droga hipnótica que utilizaba con Laura. Aunque esta vez la dosis eran algo más elevadas de lo que normalmente le aplicaba. Escucho como le explicaba las consecuencias de lo que estaba haciendo; pero no de los peligros que acarreaba esto.
Tome a mateo de una de sus manos y lo ayude a recostarse en la camilla ginecológica. Cuando el niño termino de acomodarse; su hermana observo que este tenía introducido en su ano un pequeño plug anal. También observo como lo retiraba y lo volvía a introducir sin que el niño se quejase de ello; demostrando que estaba acostumbrado a que le hiciera esto.
-Cómo te llamas – le pregunte al niño después de introducirle el plug anal
-Matilde – respondió el niño
-Y que eres – interrogue
-Soy una nena – volvió a responder
-Y las nenas que son – dije
-Somos unas putas – respondió sonriente mirando a su hermana.
Ayude al pequeño niño a bajar de la camilla y le ordene que se recostara en la gigante cama junto a la pequeña Laura y esperara. El infante obedeció tranquilamente. Comencé a explicarle a Belén que mis intenciones no eran matar; no podía hacer eso con la primera de muchas niñas que se transformarían en mis víctimas. Que trataría de quitarle su adicción a las drogas de la misma forma que había lavado los cerebros de Mateo y Laura. Y que después de ello; la haría trabajar en uno de los negocios que me había adueñado de mi amigo Eduardo ya que este era un cabaret.
Mientras le hablaba; fui aplicándole algunos medicamentos en el suero intravenoso que lentamente le hicieron perder la conciencia. Cuando esto ocurrió; después de esperar unos minutos para asegurarme de su efectividad total, le quite todas las sogas, correas y artefactos que tenía. Después de esto; le coloque un chaleco de fuerza y la puse en el calabozo en que hasta hace poco había permanecido Laura.
Me dirigí a la cama donde me esperaban Mateo y Laura. La niña ya estaba acostumbrada a recibir casi más de la mitad de mi gran ariete en su vagina y a succionarlo. Pero su ano; al igual que el de Mateo aún permanecían vírgenes.
Le ordene a Laura que le enseñara al niño como mamarme la verga; que aunque se encontraba flácida aún tenía grandes proporciones. Sin decir nada, la niña tomo de una mano a Mateo y lo acerco a mi verga; para a continuación introducirla casi por completo en su boca. Rápidamente mi ariete comenzó a elevarse y Laura le cedió el lugar al niño que al principio lo hizo de forma algo torpe; pero enseguida mejor.
Yo estaba arrodillado en la cama; Mateo se encontraba en posición de perrito mamándome la verga y Laura estaba recostada a un lado del niño succionándole el pequeño miembro. Con una de mis manos comencé a quitar y volver a introducir el plug en el ano del niño de 6 años; mientras que con la otra masajeaba la vulva infantil de la niña de 10 años.
Sobre la cama había una variada colección de consoladores, vibradores y otros juguetes sexuales; todos de diferentes formas y tamaño. Reemplace el plug anal por un dilatador. Este consistía en 5 esferas continuas y escalonadas que iban de menor a mayor; la esfera principal tenía el mismo diámetro del plug anal y la mayor era de casi 6 centímetros de diámetro.
Al introducir la primer esfera Mateo ni se inmuto; pero a medida que introducía pausada y lentamente las siguientes cada vez de un tamaño mayor. Al ingresar una nueva esfera; el niño interrumpía su mamada para emitir un ahogado gemido sollozante.
Mientras tanto; a la pequeña Laura la sodomizaba con un vibrador de tamaño normal y podía oír los gemidos de esta iban en aumento. Un plug anal más grande que había estado en Mateo estaba dentro de la niña; este además tenía la propiedad de poder inflarse mediante una pera de goma; pero aún no lo accionaba.
Cuando al fin la esfera mayor penetro el ano de Mateo; hice que este se recostara boca arriba. Fue allí que note dos cosas. La primera fue su diminuto miembro erguido; este media unos 6 centímetros de largo y no llegaba al centímetro en diámetro. La segunda cosa que note; era que en sus tetillas, los pezones estaban erguidos y que de ellos pendía una pequeña gota de un líquido blancuzco; como si de calostro se tratara.
Lo último; lo atribuí a algún efecto de las hormonas que le inyectaba y supuse que el líquido era a consecuencia de ello, ya que en Laura había ocurrido algo similar. El cuanto al tamaño de su pene sabía que era normal y que con las hormonas no solo lo castraría químicamente; sino que también le reduciría su tamaño a futuro.
Se me ocurrió dejar que los niños copularan entre ellos a modo de juego previo. Le indique a Laura que se posicionara sobre Mateo y rápidamente no solo obedeció; sino que comenzó a cabalgarlo tranquilamente. Yo me dedique a observar esa escena y mientras lo hacia los interrogue brevemente.
-Les gustan lo que están haciendo?? – fue mi primer pregunta.
-Si – respondieron al unísono.
-La sientes mejor que la mía; Laura. – pregunte
-No señor… - respondió jadeando suavemente.
-Y cual te gusta más Laura
-La suya señor – respondió con una sonrisa en su rostro
Poco después; la niña de 10 años tuvo un orgasmo y cayó sobre el pecho del niño que continuaba bombeando su pequeño miembro dentro de la vagina de Laura. Inmediatamente le ordene al niño que se detuviera y que se colocara en posición de perrito; cosa que hizo rápidamente dejando a Laura recostaba boca arriba a un costado suyo.
Me ubique detrás de Mateo y en un rápido movimiento le extraje el dilatador de su ano. En el instante en que la última esfera salió; apoye la punta de mi ariete en el virginal ano infantil masculino. A medida que mi glande se iba introduciendo en el niño; este bufaba incansablemente y se quejaba de la intromisión. Si bien mateo intento repeler la penetración; no lo pudo hacer ya que lo tenía sujeto por su cadera y aunque no veía su cara; estaba seguro que estaba llorando.
Cuando mi glande estuvo completamente adentro de él; detuve por unos minutos la penetración para que su ano se amoldara a mi descomunal verga. Es corto tiempo; me sirvió para decirle palabras tranquilizadoras y de alivio.
Con casi la mitad de mi verga introducida; lentamente me fui recostando boca arriba en la cama. En ningún momento quite mi verga y en cada movimiento que hacia mantenía sujeto al niño de 6 años semi empalado.
La gravedad y el propio peso de Mateo completaron la total penetración anal ya que el niño se encontraba en un estado de catatonia sobre mí. Tres puntos de apoyo lo mantenían vertical a mí. Uno era mi verga; con la que se encontraba empalado. El segundo; era una de mis manos que fuertemente lo sujetaba por la nuca. Y el tercero; era mi otra mano que se encontraba en su entrepierna, que además aplastaba contra su cuerpo su pequeño miembro.
Comencé a moverme lentamente; pero lograr una buena coordinación en la posición en que estaba se mehacía difícil. Así que primeramente me incorpore; quedando sentado y con la espalda de Mateo apoyada en mi pecho. La mano que sujetaba su nuca; ahora rodeaba junto al brazo el tórax infantil.
No sé porque, pero me puse de pie y comencé a moverme con el niño empalado. Esta parecía una marioneta y mis movimientos se asimilaban a estar bailando una canción romántica. Después de unos minutos estando así; las ganas de vaciar mis testículos se hicieronevidentes y Me recosté nuevamente en la cama con el niño ensartado en mi verga. Poca después descargue mi semen profundamente dentro se los intestinos de Mateo.
Sin importarme el estado en que se encontraba el niño de 6 años, retire mi verga y pude ver con el ano infantil brutalmente dilatado iba cerrándose poco a poco y que dé el no solo brotaba mi esperma; sino que también algo de sangre.
Mi ariete continuaba aun erguido y aun me falta desvirgar analmente a Laura de 10 años. Hice que Laura limpiara mi verga cubierta de semen; excremento y sangre succionándola y lamiéndola. A la niña no le agrado mucho los sabores que mi ariete tenía; pero aun así hizo su labor.
Formamos un 69 recostados en la cama mientras ella se dedicaba a mi verga;yo lamia su vagina y además quitaba e introducía el plug en su ano. Después de unos minutos comencé a accionar la pera de goma; haciendo que el plug anal se fuera inflando para después desinflarlo. La niña de 10 años estuvo a punto de tener un orgasmo producto de mis lamidas en su vulva y juegos en su ano; pero lo interrumpí para llevarla hacia la camilla ginecológica.
Una vez ubicada la niña de 10 años allí y como el plug anal se encontraba inflado a la mitad de su tamaño; procedí a retirarlo. De la misma forma que hice con Mateo; ni bien extraje el adminiculo sexual introduje la punta de mi ariete en ese pequeño agujero rosado.
Al contrario que Mateo; Laura emitió un fuerte grito al sentir como mi descomunal verga se iba introduciendo en su ano forzando a su esfínter a dilatarse para recibirme dentro de sus intestinos. Con una de mis manos comencé a masajear su clítoris para que la niña retomara su clímax sexual.
Pronto; Laura comenzó a gemir a medida que le horadaba su pequeño trasero. Mis movimientos lentos y pausados favorecieron esto y en cuestión de minutos; toda mi verga entraba y salía de su ano.
No sécuánto tiempo estuvimos, pero la respiración de Laura; los temblores en sus piernas y los espasmos constrictores de su ano que sentía aprisionar mi verga dentro de ella, me hicieron saber que estaba a punto de tener un orgasmo anal antológico. Es por eso que aumente el ritmo de mis embestidas hasta que comencé a llenar sus intestinos con mi semen.
El orgasmo de Laura llego casi al mismo tiempo que descargaba mis testículos en su ano y eso agoto las fuerzas de la niña y las mías. Después de unos minutos; retire mi verga que comenzaba a retraerse del ano infantil.
Lleve a Laura y a Mateo al otro calabozo; donde los encerré, para después ir a mi habitación a dormir tranquilamente y exhausto por la faena realizada.
Continuará